Tener una discapacidad visual no es obstáculo para que Jorge Alberto Borges González se gane el pan de cada día para sobrevivir vendiendo periódicos Por Esto! en las calles de la ciudad.
A veces se cae, se levanta, sortea vehículos a su paso y sigue su camino siempre encomendado a Dios.
Sufrió un accidente a sus 13 años, pero el hecho de no poder ver no ha sido impedimento para que a diario salga a luchar para ganarse con el sudor de su frente el sustento para su alimentación.
Él vive solo y con lo que gana de esta actividad logra solventar algunos de sus gastos diarios.
Es un ejemplo de perseverancia, no se deja vencer por los obstáculos de la existencia y mantiene la firme esperanza de que trabajando saldrá adelante.
Por Luis Manuel Pech Sánchez