Doña Nidia Can Escamilla solicita apoyó a la sociedad, para gastos médicos pues tras un padecimiento que tuvo desde el año pasado, ahora la programaron a una operación pero carece de los recursos económicos.
Un calvario es el que ha vivido la señora Nidia Can Escamilla, pues desde el 9 de diciembre del año pasado, se le presentó un dolor abdominal que posteriormente fue diagnosticado como perforación de sigmoides con absceso localizado, trauma esplénico grado dos status colostomía y por el cual tuvo que ser intervenida quirúrgicamente donde le retiraron el bazo y el colón.
En el mes de junio doña Nidia, debió tener otra cirugía pero ante el aumento de casos del COVID-19 y la saturación de hospitales no fue posible intervenirla, durante todo este tiempo se las ha visto difícil ya que por la condición en la que se encuentra no puede continuar con su trabajo que tenía como empleada doméstica en Motul.
Hasta la fecha no ha recibido ningún tipo de apoyo y para poder solventar los gastos costosos como comprar las bolsas de colostomía que requieren ser cambiadas cada tercer día y la limpieza de la herida, tuvo que vender prácticamente todas sus pertenencias, un joven enfermero, quien le realiza la limpieza y cuidado de la herida es la única persona que la ha apoyado consiguiéndole algunas veces las bolsas que necesita y que para ella es “como un ángel”.
A pesar de que no debe realizar ningún esfuerzo físico, ella junto con su esposo, ambos diagnosticados con diabetes, han buscado la manera de salir adelante vendiendo tortas, tamales y refrescos para juntar dinero ya que el próximo lunes 7 de diciembre, doña Nidia recibirá nuevamente una cirugía y le pondrán unas grapas que servirán para acomodarle el intestino, grapas con las que no cuenta el “Hospital General Dr. Agustín O’Horán” y que ella misma deberá comprar con un costo aproximado de $12,000 pesos.
Ante la proximidad de la cirugía y la falta de recursos, doña Nidia con lágrimas en los ojos pide la ayuda de todos los motuleños para que a través de donativos pueda adquirir las grapas que necesita para su operación.
Por Alejandro Collí