El estar en casa no siempre implica diversión. En ocasiones, tanto los padres de familia como los hijos pueden llegar a sentirse abrumados o con sentimientos de tristeza causados por el encierro temporal, manifestó ayer Paola Maribel Prieto Bustillos, psicóloga y maestra en Psicopedagogía Clínica Infantil.
Ante el aumento de días de cuarentena para evitar el contagio del coronavirus Covid-19, los papás no deben verlo como algo negativo, sino debe servirles como un tiempo para reflexionar con sus hijos, hacerlos parte de las actividades y no alejarlos de la convivencia familiar sana.
La entrevistada manifestó que, en el caso de los niños más pequeños, que son los que cursan maternal y kínder, aún no comprenden a ciencia cierta esta problemática y la importancia de quedarse en casa.
A los niños más grandecitos se les debe concientizar a que este tipo de encierro temporal se debe llevar con calma y no obligar a sus hijos a realizar todas las tareas marcadas en un día, sino espaciarlas durante la semana, además de establecer rutinas para aprovechar el tiempo.
“Se puede establecer de 30 minutos a 1 hora para realizar tareas, jugar y ayudar a realizar tareas domésticas”, dijo.
Efectos negativos
Comentó que desde el primer día de cuarentena los niños dejaron de acudir al colegio e interrelacionarse con sus compañeros y maestros; ahora no pueden acudir a parques o lugares de esparcimiento y por su edad es muy difícil mantenerlos inactivos o quietos por mucho tiempo, circunstancias que pueden producir en ellos cierta inestabilidad emocional, como estrés, tristeza, irritabilidad y enojo.
Efectos positivos
Dijo que con la cuarentena se pueden afianzar los lazos afectivos entre padres e hijos, ya que permite la posibilidad de convivir tiempo completo con ellos, sobre todo si tenemos en cuenta que en la actualidad tanto papá como mamá salen del seno del hogar para realizar sus trabajos cotidianos y dejan a los hijos al cuidado de los abuelos o del personal doméstico; en consecuencia, tienen poco tiempo para un sano esparcimiento en casa; es por ello que en esta época difícil se debe aprovechar el tiempo completo que debe ser utilizado para crear nuevos lazos de unión que hagan de la familia una parte fundamental y así dar a los hijos la posibilidad de que se sientan protegidos por sus padres.
Terapias familiares
Para combatir los aspectos negativos que deja la cuarentena en los niños, es necesario que cuenten con la ayuda incondicional de sus padres o familia cercana con quienes tengan que convivir, por lo que les corresponderá a ellos poner en práctica ciertas terapias de familias, como el mantenerlos ocupados a través de juegos o actividades con las que refuercen sus conocimientos escolares mediante premios y castigos, que en su momento puedan ser proveídos y no necesariamente tienen que ser comida, si no algo que realmente les guste hacer, es decir, que los mantenga interesados y pueda ser más llevadero el encierro temporal en casa.
Juegos de mesa
Son una buena herramienta para la integración familiar, siempre y cuando el juego en cuestión sea adecuado para su edad y de preferencia sean didácticos y bajo control y colaboración de sus padres.
En el caso de los niños de kínder la entrevistada considera adecuados los juegos de armar rompecabezas, memorama, jenga, crear, burbujas y moldeado de masitas, libros para colorear, operando, el avión, destreza, laboratorio de arena, la tiendita y juegos de pesca, entre otros.
Para los niños que cursan la primaria pueden jugar damas chinas, el denominado “UNO”, scrabble, Monopoly, turista, basta, jenga, rompecabezas que tengan mínimo 500 fichas para armar, serpientes y escaleras, el juego de la oca, twiste, adivina quién, caras y gestos, entre otros.
Beneficios
En general, estos juegos propuestos los ayudarán a mejorar la coordinación ojo-mano, la motricidad fina y gruesa, la fluidez visual, expresión verbal así como de transmitir sus sentimientos, desarrollar su imaginación, ampliar sus conocimientos, y a su vez se mantendrán ocupados jugando;
En el caso de los niños de primaria se puede manejar de manera adicional premios y castigos: “sería premio algo que sea de su agrado y como castigo realizar alguna actividad en casa”, dijo.
Se les deberá fijar los tiempos de juego combinados con las tareas escolares para reforzar el tiempo que permanecerán fuera de las aulas, todo ello de conformidad con los maestros en caso de que estos fijen algún programa a seguir.
Juegos de piso
Estos juegos son ideales para gastar energía, fomentar la libre creatividad, mantener sus mentes ocupadas, así como tratar de imitar las fortalezas de sus padres, pues intentarán competir con ellos corriendo, saltando, alcanzando metas con las que obtengan algún premio o castigo, como motivante.
Relación padres e hijos (as)
La convivencia permanente mejora las relaciones entre padres e hijos, aunque puede darse el caso que cuando esa convivencia es excesiva, como en el caso de una cuarentena en la que no hay otra opción que la cohabitación por tiempo prolongado entre los padres y los hijos, los conflictúe y caigan en un estado de depresión, lo que corresponde a los padres manejar con ayuda psicológica, en caso de que llegara a ser insostenible.
De ahí la importancia de fijar tiempos, reglas y límites en los juegos y en las actividades escolares, procurando dar espacios libres y relajantes para cada uno de ellos.
Juegos tradicionales
Los juegos tradicionales de mesa son aprendidos por generaciones de abuelos a padres y estos a sus hijos, como es el caso de la lotería y serpientes y escaleras, entre otros; son juegos que nunca pasan de moda y desde luego pueden llamar la atención de los niños.
Juegos digitales
Ante los avances de la tecnología es necesario no permitirles a los niños que se mantengan tanto tiempo en los juegos en línea, tabletas electrónicas, celulares y computadoras, pues eso solo puede causarles hasta daños cerebrales, si exceden de un límite razonable de tiempo para estar frente a esos aparatos electrónicos; por ello la entrevistada considera necesario y adecuado enseñarles sólo aquellos juegos que refuerzan sus habilidades y capacidades cognitivas
La psicóloga y maestra en Psicopedagogía Clínica Infantil considera adecuado que se les permita estar frente a esos juegos por más de 1 hora en a los niños de kínder y en el caso de los de primaria, 2 horas, salvo el caso de que esto tengan que utilizar estas herramientas en su tareas, lo que deberá ser bajo la estricta supervisión de sus padres.
Finalmente la entrevistada recomienda que los padres escojan muy bien tanto los programas en línea, que en esta época se ofrecen de manera gratuita, como los juegos y actividades que determinen más agradables a sus hijos, procurando que aprendan que en los juegos unas veces se ganan y otras se pierden, son para divertirse y no para crear polémicas o conflictos familiares.
(Texto y foto: Melly Manzanero)