Dos jóvenes vieron en los malabares una opción de sustento luego de quedarse sin empleo a causa de la pandemia del COVID-19.
Iván Hernández y Jesús Chi trabajan todo el día bajo el sol como malabaristas en los semáforos para llevar el sustento a sus familias.
“Umán responde a pesar de la pandemia porque valora el arte callejero, no nos ven como delincuentes o como drogadictos y nos cooperan con algo” comentó Iván Hernández de 29 años de edad.
Hernández, originario de Progreso solía trabajar como panadero antes de la contingencia.
Jesús Chi, originario de Oaxaca trabajaba en Chimal Circus, el cual cerró sus puertas desde hace tres meses. “La verdad hay que juntar el dinero posible porque nadie sabe lo que va a pasar más adelante", dijo.
Ambos explicaron que cumplen con las medidas de higiene por el COVID-19 como el uso del gel antibacterial y cloro. Además, al final de cada jornada lavan la ropa que utilizaron para no llevar el virus a sus casas.
En el reporte más reciente de la Secretaría de Salud en Yucatán se informó que Umán cuenta con un total de 394 casos positivos acumulados de COVID-19.
Con información de Enrique Osorno
Por Redacción Digital Por Esto!
GM