La muerte de un velador en la privada Imperio Conkal, ubicada sobre la calle 23, carretera a Xcuyún, ha generado una gran incógnita dentro de la comunidad, pues algunos aseguran que se trató de un homicidio, aunque las pruebas apuntan a un suicidio.
Según datos recabados en las primeras horas de ayer, el velador Pedro Olmedo Basilio, de 42 años, acudió hasta la residencial para el cambio de turno, pero al ingresar al sitio se percató que las luces se encontraban encendidas, por lo que intentó entrar a la caseta, pero esta se encontraba cerrada. A raíz de esto decidió asomarse y fue ahí cuando dio cuenta que su compañero se encontraba tirado en el piso.
Sorprendido avisó al número de emergencias, arribando de inmediato policías municipales quienes observaron la escena y, con el apoyo de paramédicos de la SSP y el otro velador, lograron abrir la caseta; allí encontraron el cadáver con un machete incrustado en el abdomen.
El cuerpo fue identificado como Isidro y originario de Veracruz, al igual que su compañero.
La zona fue acordonada mientras arribaba personal del Servicio Médico Forense y peritos de la Policía Estatal de Investigación, quienes realizarán las labores pertinentes para descubrir qué ocurrió.
La escena alarmó a los pobladores de la zona, considerada una residencial de alta plusvalía y que aún está en proceso de construcción. El cadáver estaba tirado en el piso pues, según indicaron, en vida acostumbraba poner una colcha para descansar.
Por Alejandro Collí