Un grupo de personas e invitados estuvieron el sábado en la tarde en la quinta de Gabriel Martín, en la cercana Comisaria de Nolo para disfrutar espectáculo de Luz y Sombra o el descenso de Kukulcán en una réplica del Castillo de Chichén Itzá, el cual se encuentra a la orilla de un estanque.
Después de presenciarlo, aunque no se pudo completar porque el cielo se nubló un poco, los visitantes pasaron a un corredor donde se ubica un Mural Maya, a través del cual Martín dio algunas explicaciones sobre los Mayas y su cultura, calificándolos de sabios, matemáticos y con conocimientos astronómicos.
Mencionó a su padre, don Vicente Martín, a quien le llevó 70 días plasmar el mural y de quien heredó esos conocimientos.
Indicó que ni siquiera terminó la primaria, pero tenía la sabia virtud de conocer todo lo relacionado con la cultura maya, quienes creían que la tierra era plana y estaba sostenida por cuatro Bacabes.
Entre los invitados había un grupo de estudiosos de los Mayas, hombres y mujeres que hacían preguntas sobre la cultura de estos y se mostraron muy interesados haciendo preguntas que eran respondidas por Martín.
La visita término poco después de las seis de la tarde. Pero a diferencia de otros años hubo muy poca gente debido a la contingencia sanitaria.
Entre los visitantes al descenso de Kukulcán se encontraban el espeleólogo Raúl Andrade, el psicólogo Gabriel Sáenz y el ingeniero Roger Díaz Cortes, quienes se mostraron muy interesados en las explicaciones sobre la el tema y de los conocimientos que dejó don Vicente Martín, y que ahora continua su hijo Gabriel.
Enrique Sabido Araujo