Luego de que el agua fuera cortada en un área del asentamiento Emiliano Zapata Sur y el resto de la zona, se mantiene a la expectativa de sí les cortarán el suministro el próximo 15 de enero, los habitantes aseguran que nadie de Desarrollo Social se ha comunicado con ellos para avisarles si obtendrán descuento o facilidades de pago.
A pesar de ello, el Director de Desarrollo Social, José Luis Martínez Semerena, aseguró que, quienes hayan acudido a la dependencia, serán acreedores para pagar únicamente entre 800 y mil pesos, en vez de los mil quinientos. Por otro lado, la Junta de Agua Potable de Yucatán (Japay), señaló que no tuvo ninguna injerencia en el corte de agua que sufrió la zona.
Berenice Dorantes Ku, quien se encuentra preocupada por dejar de tener agua, dijo que no le han llamado para informarle si podrá obtener alguna facilidad y asegura que la necesita mucho para realizar su contrato por el servicio del agua, ya que vende en tianguis y a veces solamente logra ganar entre 70 y 100 pesos al día.
“Fui en diciembre a la dependencia, dejé mi teléfono y todo, pero no nos han dicho nada y cuando vinieron a verla (la casa) habían dicho que pagaremos mil 200 pesos, pero yo no sé qué haré, soy madre soltera y no me alcanza… Es mucho”, comentó.
Del mismo modo, la encargada de la tortillería del lugar, aseguró que ya llevó sus papeles, pero no han recibido ninguna respuesta o aviso sobre si procedió o no el descuento para el contrato.
Quienes se encuentran en la misma situación son Feliciana y María Maricela Pech, pues apuntan que ya han llevado sus papeles, pero se mantienen a la espera para saber si será posible recibir algún tipo de facilidad y/o descuento.
Por su parte, Leydi Abigail Cetina Rodríguez, quien habita en la manzana que ya no cuenta con agua, explicó que ella fue a Desarrollo Social, pero no es candidata a recibir el apoyo, puesto que no ha comenzado a pagar su terreno.
Ante esto, se ha visto en la necesidad de pedir apoyo a su mamá, quien les provee botellones de agua para que puedan bañarse ella y sus hijos, “pero no alcanza. Vamos a su casa a lavar, bañarnos y todo”, reveló.
En tanto que Juana Elena Osorio Martínez y Mario Antonio Enríquez Cocom, quienes también son afectados en la zona en donde ya se ha cortado el agua, puntualizaron que no tienen el dinero para pagar el contrato y no han acudido a Desarrollo Social porque pensaron que al ir tendrían que pagar en el momento.
Sin embargo, comentaron que, cuando quitaron las tomas de agua, les dijeron que era para que pusieran las tuberías, pero en realidad los dejaron sin agua. Además, les pidieron que desenterraran las mangueras que llevaba el vital líquido hasta su hogar.
Actualmente reciben el apoyo de sus vecinos, quienes les permiten llenar cubetas de agua para cubrir sus necesidades de higiene, entre otras.
De igual forma, los vecinos Benjamín Buenfil Lugo e Ingrid Sarahí López Estrella coincidieron en que llevan dos meses sin agua, luego de que les quitaron las tomas que habían colocado y cortaron la manguera que distribuía a la zona.
Ante este panorama, Benjamín explicó “no tenemos para pagar”, por lo que no saben qué pasará con ellos.
Con respecto a la situación, la Junta de Agua Potable y Alcantarillado de Yucatán (Japay) aseveró que no tuvo nada que ver con el corte del agua, sino que fue el propio Ayuntamiento el que lo realizó, con el objetivo de “motivar” a que los residentes del asentamiento firmen su contrato.
Asimismo, expresaron que el precio no es algo que les corresponda decidir, sino que es una tarifa unificada. Y, enfatizaron, que no se tuvo ninguna injerencia de la Junta de Agua Potable para el corte del servicio en la zona. Sin embargo, apuntaron que el Ayuntamiento ya no continuará cortando el servicio del agua para la comunidad.
A pesar de ello, solicitaron a los vecinos que hagan un esfuerzo para realizar sus contratos y pagar por el servicio que reciben.
Ante la situación, el Director de Desarrollo Social, José Luis Martínez Semerena, afirmó que quienes hayan entregado sus papeles pagarán únicamente el costo por el contrato del servicio (a la Japay), puesto que la infraestructura fue pagada con los impuestos de los ciudadanos.
Dicho valor ronda entre los 800 y mil pesos, para lo cual les entregarán unas cartas firmadas que deberán presentar ante la Junta de Agua Potable, lo que les permitirán percibir la reducción del precio.
“El asentamiento de la Emiliano Zapata Sur ha tenido un proceso de participación ciudadana en la zona, son los vecinos que toman las decisiones de las prioridades para el lugar y que así poco a poco deje de ser un asentamiento irregular como se tenía antes y se pueda ir convirtiendo en una colonia más de la ciudad”, declaró.
Asimismo, señaló que entre 2019 y 2020 se destinaron 14 millones de pesos al rubro, de los cuales siete han sido para la red eléctrica y los otros siete para el agua potable; ya que antes los vecinos se colgaban de la luz y agua de otras colonias cercanas.
Con esto, explicó que cada vivienda contará con su propio servicio de luz y agua, siendo que el sitio se compone de 488 casas.
“La primera etapa, que fue el alumbrado eléctrico, ya está completado al 100%, incluso se metió iluminación led en color blanco, de tal manera que toda la colonia queda perfectamente iluminada, evitando el tema de inseguridad que pudiera haber en la zona”, comentó.
Con respecto al tema del agua, expuso que al inicio hubo algunas complicaciones que retrasaron la instalación, pues se tuvieron que conectar a otra de las tuberías que tenía la Japay en el área.
“Ya nos avisaron que en diciembre de 2020 ya quedó todo listo y lo que sigue es que los vecinos acudan a la Junta de Agua Potable para realizar su contrato de manera individual, cada casa tiene que realizar el propio, como lo hace cualquier ciudadano en el resto de la ciudad”, apuntó.
En este sentido, manifestó que cuando el ciudadano acude a la Japay se le cobra por dos conceptos, siendo un monto el que corresponde al contrato y otro para al uso y aprovechamiento de la infraestructura, es decir, la tubería que se colocó para que fuera posible que el agua llegara a la zona.
Con respecto a este rubro, Martínez Semerena detalló que “como la Japay no es quien invirtió en el recurso para la obra, sino el Ayuntamiento, con los impuestos de los meridanos, los ciudadanos acuden a la Dirección de Desarrollo Social y se les emiten las constancias para que nosotros le informemos a la Japay que esta infraestructura se llevó a cabo con recursos del municipio, de manera que el monto quede dispenso; únicamente tendrían que pagar el de su contrato, una vez que les entreguemos las constancias”.
Dicho costo, indicó, lo tiene de forma exacta la Japay, pero -calculó- que está entre los 800 y mil pesos y es un pago único para poder el acceso al servicio.
Refirió que actualmente los residentes del asentamiento de la Emiliano Zapata Sur se han estado acercando poco a poco, pero en caso de no haberlo hecho, solicitó que se acerquen para que también se les emita su carta firmada (proceso en el que se encuentran).
Aseguró que ya tienen un aproximado de 250 de ellas, de las 488 viviendas en el lugar, las cuales dijo que espera sean entregadas posteriormente.
Por otra parte, la Comisión Nacional de Agua (Conagua) dio a conocer que, por medio del Programa para el Desarrollo Integral de los Organismos Operadores de Agua y Saneamiento, este año se adquirieron e instalaron 11 mil 706 medidores de agua potable en la ciudad de Mérida; además, se implementaron tres camiones pipa, cada uno con capacidad de 20 mil litros, para el reparto de agua en las localidades que lo han requerido debido a la emergencia por COVID-19.