A pesar de que la Secretaría de Fomento Económico y Trabajo (Sefoet) dio luz verde a una planta generadora de energía en Kanasín, operada por la empresa española Iberdrola, habitantes de dicho municipio afirmaron desconocer la llegada de este proyecto, cuya inversión se estima en 8 mil 436 millones de pesos, que se esperan recuperar en un plazo de 10 años.
De acuerdo con el sitio web de consultas públicas vigentes de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), el periodo para la instalación de la Central de Ciclo Combinado Mérida (CCC Mérida) inició desde el pasado 1 de octubre y concluirá el 28 del mismo mes, sin embargo los pobladores se mostraron desinformados acerca de dicha termoeléctrica.
Cabe señalar que en el lugar donde se pretende construir, hasta el momento no se observa obra alguna, ni árboles talados, aunque en la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) enviada por la empresa a Semarnat, ya cuenta con un terreno delimitado, ubicado a un costado de la localidad de Tepich Carrillo.
“¿Van a hacer una planta?”, cuestionó Manuel Cardos, empleado de un céntrico comercio de abarrotes ubicado frente a la plaza principal de la ciudad.
“Lo que sí (hay) aquí constantemente hay apagones, desde que cambiaron los postes se queman los transformadores”, agregó el vendedor, quien espera que con este proyecto dejen atrás los cortes en el suministro eléctrico.
El documento enviado por Iberdrola a Semarnat indica que la CCC Mérida, utilizará gas natural del gasoducto Mayakan, que se conectará a la planta mediante un nuevo ducto de tres kilómetros de longitud. De igual forma, requerirá de 25.5 metros cúbicos por hora (m3/h) de agua, que será sustraída a través de pozos profundos.
“Yo tengo entendido que en un proyecto de esos se tiene que consultar a la ciudadanía, para ver de qué manera va a impactar y si está de acuerdo. Porque si no pasa como lo de las granjas de Homún”, dijo Vicente Chalé, quien contó que participó en la construcción de la sub estación de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) de Valladolid.
El adulto mayor señaló que durante la construcción de aquel proyecto, se presentó como la solución al desabasto de energía en el Oriente de Yucatán, sin embargo, al final la mayor parte de la electricidad generada es enviada a la Riviera Maya de Quintana Roo.
“Todos estos grandes proyectos son buenos para cuando se distribuye el producto o la ganancia entre la población cercana. Lo estamos viendo, por ejemplo, con los parques eólicos, aquí en Dzilam (Bravo), la gente se manifestó, porque la energía que producían se la quedan los que instalaron el proyecto”, añadió el entrevistado.
Cabe señalar que la planta se pretende ubicar en la frontera entre Kanasín y Acanceh, a menos de un kilómetro de la localidad de Tepich Carrillo, a 22 kilómetros al Sureste de Mérida y 36 kilómetros del aeropuerto internacional.
En la actualidad, las colindancias con el predio de 823 mil 885 metros cuadrados (m2), no presentan alguna actividad comercial excepto por el lado Noroeste, donde según los mapas existen dos gasolineras y 150 metros al Noreste, una ranchería.
De igual forma, dicha central estará ubicada a poco menos de cuatro kilómetros de la Subestación Eléctrica Kanasín, localizada en la villa Jorge Coral, a la que estará conectada de manera directa, mediante una línea de transmisión de alta tensión, que será soportada por 13 torres que pasarán a espaldas de La Campanita y San Antonio Tehuitz.
“Yo solo he escuchado que hablen de lo del paso del ferrocarril (Tren Maya) ahí en la carretera a Valladolid, no sé si por acá ya empezó el trabajo, pero según va a pasar por Tizimín, Valladolid y hasta Chetumal, pero de esa planta yo no sé”, comentó Magdaleno Estrella Cocom, vecino de la localidad.
De oficio albañil, pero retirado por la edad, el colono recordó que cuando comenzaron a construir naves industriales cerca de la carretera Mérida-Cancún, mucha de la mano de obra de Kanasín se vio beneficiada con puestos de trabajo temporales, que duraron al menos dos años.
En ese sentido, añadió que, con la llegada de proyectos como el Tren Maya, la CCC Mérida y un centro de logística que también anunció la Sefoet, espera vuelvan a emplear a muchas personas, para que puedan salir de la crisis económica que causó el COVID-19.
Por otra parte, Enrique Uicab manifestó que, a la par de estas grandes inversiones de carácter privado, el gobierno y el municipio también deben garantizar que parte de esos recursos económicos se destinen al mejoramiento de servicios básicos, como el suministro de agua y el mejoramiento de los centros de salud en la localidad.
“Sí sería bueno porque Kanasín ya creció y cada vez necesita más energía. Aquí en este sector tres veces a la semana se va la luz, además el agua, hay ciertas horas a las que sube al depósito, porque las bombas no están funcionando, no hay recursos para repararla y tampoco hay una de emergencia”, añadió.
De acuerdo con la consulta 31YU2020E0057 a Semarnat, el proyecto está planeado para un plazo total de 28 años, que se dividirán en 11 meses para la preparación del sitio, 32 meses de construcción, 25 años de operación y 24 meses para el abandono.
La empresa Iberdrola, encargada de dicho proyecto energético, detalla en su página oficial que este tipo de plantas termoeléctricas requieren de una fuerza que mueva las aspas de una turbina, la cual acciona el rotor de un generador, y así producir electricidad.
“De esta manera, la energía mecánica que se imprime a la turbina es transformada en energía eléctrica. La fuerza inicial que se requiere para dar movimiento a la turbina puede ser proporcionada por combustibles como carbón, combustóleo, diésel, gas, gas natural o uranio”, detalla.
Las plantas de ciclo combinado, indica, se inscribe en la categoría de termoeléctricas, con la diferencia de que su proceso combina dos ciclos que operan de manera consecutiva, con gas natural y vapor.
“La primera turbina se mueve gracias a la combustión de gas natural, que permite activar el generador; derivado de esta energía, se produce el calor necesario para obtener vapor, mismo que mueve la segunda turbina que activa de nuevo el generador”, puntualiza.
Entre los beneficios de este tipo de termoeléctrica, la compañía destaca la flexibilidad de adaptarse a la necesidad de producción, pocas emisiones de contaminantes altamente dañinos, el suministro del combustible (gas natural) es a través de un gasoducto enterrado, así como menor consumo de agua, ya que utilizan únicamente un tercio del agua que se requiere en las centrales térmicas.
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JG