A sus 68 años de edad y ante la falta de opciones de empleo, Adolfina Cámara recorre las calles de la villa de Peto para terminar una jornada de venta con 40 o 70 pesos.
El rostro cansado es notable en la adulta mayor, pues al no tener fuente de ingresos no le queda de otra que salir a comercializar productos fríos; sin embargo, las bajas temperaturas que prevalecen en la villa dejan a la mujer sin una exitosa jornada de ventas.
Adolfina Cámara comentó: “Me daría más vergüenza andar pidiendo limosna. No tengo recursos suficientes para mantenerme, pero eso no es obstáculo, aquí estoy con más fuerza y con ganas de salir adelante. Desgraciadamente ahora no hay buenas ventas, pero no es motivo para renunciar a comercializar mis productos”.
Diariamente la mujer recorre decenas de calles en la villa, esperando tener una respuesta positiva por parte de los pobladores.
Adolfina añadió: “Cuando voy pasando por las calles muchos se me quedan viendo como si fuera un bicho raro, pero en realidad sólo estoy en busca de mi sustento, por lo que actualmente todos los gastos corren por mi cuenta y eso que en ocasiones salgo a trabajar sin haber desayunado, pero con toda la actitud de que pueda tener una buena venta”.
Señaló no tener un horario para regresar a su casa, ya que en muchas ocasiones debe recorrer muchas calles y es poco el dinero que obtiene, lo que le sirve para su alimentación.
Asimismo, indicó que al no tener ninguna opción de empleo, no dudó en dedicarse a este trabajo, aunque en los últimos años la demanda está por los suelos debido a que pobladores optan por comprar productos más económicos.
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CC