Una mujer identificada como Lilí Ojeda, de 60 años de edad, se plantó afuera del Palacio de Gobierno para denunciar que una de sus nietas está siendo abusada sexualmente por su padrastro, motivo por el cual pidió la intervención del mandatario yucateco, Mauricio Vila Dosal, para que su caso sea tomado en cuenta.
La denunciante comentó que, desde hace tres años está luchando para que las autoridades estatales intervengan y rescaten a su nieta mayor, ya que además de ser violada, también es golpeada por la pareja sentimental de su madre, identificada como L.H.O., quien se aprovecha de la joven discapacitada, ya que es sordomuda.
Afirmó que su nieta es abusada porque durante el año en que su hija, sus nietas y el padrastro vivieron en su domicilio ubicado en Residencial Pensiones, notó hábitos raros.
“Yo vi que cuando las niñas entraban a bañarse, él iba, abría la puerta y entraba”, comentó Lilí, quien le preguntaba a su hija por qué el hombre se metía con ellas.
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Explicó que L.H.O. siempre ha defendido a su pareja sentimental, A.R.B.C., a quien no le decía nada y justificaba sus acciones diciendo que, eso de meterse al baño cuando las menores se bañaban, era algo que hacía desde que se juntó a vivir con ellas, situación que la entrevistada reprobó en todo momento.
La mujer indicó que el hombre también suministraba alguna droga para que su hija se durmiera y él pudiera dormir con las niñas. “Yo vi que agarroteé a mi nieta. La abrazaba de su cintura, le ponía shorts cortos, le ponía sus blusas sin brasier y la toqueteaba”, comentó la señora afuera del Palacio de Gobierno.
Debido a su discapacidad, un día la supuesta víctima se montó sobre un peluche y empezó a jalarle el pelo y con señas y ademanes le dijo a su abuela que su padrastro le hacía lo mismo. “Me trataba de decir que ella era el peluche y gritaba”, comentó Lilí Ojeda, quien reiteró que su hija no hace nada, debido a que tiene trastornos mentales.
Explicó que su hija, desde el 2008, iba al Hospital Psiquiátrico de Yucatán, ya que en el pasado intentó suicidarse y mencionó que, aunque existe un expediente en la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia (Prodemefa), con el número PR/57/2019 por maltrato infantil, las autoridades no han hecho nada para detener los abusos en contra de su nieta.
“Yo pido ayuda al Gobierno (del Estado) para que salven a mi nieta, quien en noviembre me indicó con ademanes que se iba a suicidar. Me da miedo que se mate o que esté encerrada en un cuarto porque mi hija está loca y la mate de hambre”, comentó Lilí, quien mostró fotografías de su hija con su pareja sentimental y sus nietas. Agregó que, aunque ha querido ir a denunciar los hechos a la Fiscalía General del Estado (FGE), la autoridad ha minimizado su denuncia y, sobre ese tema, indicó que es su hija y el padrastro, quienes han impedido que interponga su denuncia, debido a que trabajan en los cuerpos de seguridad del estado.
SY