“Continúan arribando turistas extranjeros a la reserva de la Biosfera de Ría Lagartos, en su mayoría españoles y alemanes, que acuden a disfrutar de los atractivos naturales de esta paradisíaca joya de la biósfera”.
El taxista Edwin Bazán Piña, quien ofrece sus servicios frente a la terminal del Noreste, señaló que durante estas vacaciones de Semana Santa le ha ido muy bien a su gremio pues el arribo de esas personas vino a traer esperanza, ya que al demandar sus servicios de tours obtienen el sustento para sus familias, que a duras penas conseguían durante estos tiempos de la pandemia que ha afectado la movilidad de las gentes.
Expuso que es así cómo notan que se va dando la reactivación, pues llegan muchos turistas para conocer las zonas, algunos de ellos mochileros y como taxistas les ponen a disposición su vehículo con un costo de servicio de entre 250 y 300 por persona e incluso se les ofrece el tour para visitar Las Coloradas, Río Lagartos y Cancunito, sitios por los cuales ellos mismos preguntan por habérselos recomendado algún amigo o conocido que ha llegado antes.
Mencionó que muchos de los turistas prefieren los taxis, pues los esperan en donde vayan y no tienen que estar al pendiente del paso de un camión que los retorne a la ciudad.
Su viaje inicia visitando Las Coloradas, donde los turistas se fotografían en las aguas rosas, luego se dirigen a Cancunito, considerada como una playa virgen que cobija infinidad de fauna y vegetación, un sitio tranquillo que se convierte en una excelente opción para descansar y estar en contacto con la naturaleza; se caracteriza por sus aguas turquesas y sus espectaculares amaneceres y atardeceres, enmarcados por la bella estampa del astro rey al nacer y al ocultarse.
Posteriormente, los llevan a la majestuosa vista de los flamencos, el cual deja maravillado a quienes lo conocen, debido a que el lugar, ya que este sitio que se considera su santuario de anidación.
Indicó que los turistas igualmente buscan el llamado “baño maya” que se da en el puerto de Río Lagartos, el cual ya es uno de los atractivos más demandados en este paradisíaco paraje natural, considerado como una inolvidable experiencia que se asegura conlleva muchos beneficios a la salud de la piel.
Explicó que este ritual consiste en llegar a un sitio de la playa, bajar de la lancha a un área donde yace el denominado barro blanco o arcilla, para luego escarbar tantito y cubrirse el cuerpo con él, generando una sensación de relajación e hidratación del cuerpo.
“Según muchos ayuda a suavizar y dejar muy tersa la piel por la alta concentración de azufre, algas y una gran cantidad de minerales, sales y nutrientes que la exfolian”, señaló.
Bazán Piña compartió que este barro blanco deja la piel suave y tersa, que la arcilla se seca en la piel y mientras tanto el que se cubre con ella puede sentir como si el cuerpo flotara y se hace más liviano por la acumulación de las sales y minerales, mismas que crean espuma blanca en el agua y que la brisa esparce a su alrededor sintiéndose como en un jacuzzi, “Es un spa virgen”, además de revelar que sirve para protegerse del sol y para que los tábanos no los piquen.
Explica que los turistas quedan cubiertos con el barro blanco por un lapso de media hora o 20 minutos, mientras llegan a Chiquilá para deshacerse de toda la arcilla y bañarse disfrutando de las aguas cristalinas del puerto, ahí pueden convivir, así como disfrutar de su rica gastronomía para luego visitar el sendero donde concluyen la visita deleitándose con la fauna, con la flora y sobre todo con la presencia cercana de los cocodrilos.
Por último exhortó a las personas a que cuando terminen su visita lleven consigo sus desechos para no contaminar esos lugares que continúan siendo verdaderos santuarios naturales para deleite de los turistas de todo el mundo.