Una de las tradiciones arraigadas en la comisaría de Citilcum, en el Pueblo Mágico de Izamal, es la de repartir atole nuevo en los gremios, tanto para acompañar las comidas que se ofrecen como para saciar la sed de los socios y feligreses que acompañan la promesa anual.
Bajo el nombre de atole nuevo esta bebida es realizada de forma artesanal, en la cual es indispensable el maíz tierno o recién cosechado, todo con el fin de lograr generar su característico sabor.
La vecina María Alvarado compartió: “todo esto es muy hermoso, se preserva la rica tradición de preparar y beber el atole nuevo como de realizar el gremio en honor del Santo Cristo de este pueblo de Citilcum. Es una tradición de años que nuestros abuelos empezaron y ahora nos toca continuar”.
Antonio Ceh explicó el proceso de la elaboración diciendo que: “primero se comienza con el desgrana de las mazorcas tiernas, evidentemente seleccionadas para servir. Después, deben moverse en el molino de mano y se deshace la masa en un poco de agua fría, posterior debemos añadir agua caliente en la cantidad necesaria y se deja asentar. Esto se hace muy temprano o la noche anterior. Cuando haya pasado un tiempo considerable de poco más de 6 horas, se les retira el agua y se agrega agua limpia, luego es necesario que se cuele, para cocinarse con el azúcar y la sal, dejamos cocer sin dejar de mover hasta que suelte el primer hervor y listo, se retira del fuego”.
Los gremios de mes de septiembre se realizan en el marco del novenario anual al milagroso Santo Cristo de la Exaltación, especialmente venerado en la comunidad donde tiene su pequeño santuario. El uso del atole nuevo en los gremios de Citilcum es un distintivo especial de las celebraciones gremiales en la comunidad cuyos orígenes se remontan a la gran producción maicera del pueblo en el pasado.
Sobre este asunto Marcos Caamal, persona de la tercera edad, comentó: “eso del atole nuevo en los gremios se ha conservado en la actualidad, pero eso lo hacían los antiguos porque había mucho maíz, se lograba tener buenas cosechas, donde te vires hay maíz, porque es la base de alimentación de todas las familias del pueblo, qué digo del pueblo, ¡de todo Yucatán! ”.
Los gremios entran en la Iglesia principal del pueblo en la tarde y en tanto en las mañanas son las salidas después de las Misas y rosarios señalados, teniendo cada uno la responsabilidad de solemnizar uno de los días de la fiesta religiosa.
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JG