El puerto de Progreso vivió ayer hasta altas horas de la noche una de las peregrinaciones con más presencia hasta el momento, tras juntar a casi 500 fieles creyentes dentro del gremio de señoras, mismo que se celebró justo a la mitad de estas festividades, pues el calendario culmina el día doce.
El derrotero partió de la capilla situada en la calle 31 por 100 y 98 de la colonia “Canul Reyes”, siendo el tambor y trompeta de la banda de guerra de la secundaria “Carlos Marx”, siguiendo a sus espaldas un camión adornado con flores para mostrar en dos secciones a jóvenes y niños personificando la escena en la cual Juan Diego se hinca ante la Guadalupana.
La misa respectiva fue especial también, pues el párroco del puerto, Óscar Manuel Cetina Vega, celebró 27 años de ordenanza sacerdotal, por lo que las ovaciones y felicitaciones tras su entrada con el contingente a la iglesia del centro del puerto, no faltaron.
Destacó el operativo de seguridad a cargo de la base de Comisión Nacional de Emergencia, así como también de los más de veinte boy scouts que estuvieron presentes, quienes por medio de una cuerda que rodeó el camión de la imagen de la Virgen, se logró evitar algún percance para mantener un saldo blanco en la procesión.
A lo largo de la madrugada del martes, como si se trataran de los tiempos antes de la pandemia, permaneció el primer cuadro de la ciudad con progreseños llevando comida y apoyo a los antorchistas que cada día aumentan su llegada al puerto como parte de sus respectivas travesías en honor a la figura religiosa.
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JG