Yucatán

Pescadores de Progreso se preparan para ponerle fin a la veda de mero

Alrededor de 4 mil hombres de mar regresarán a sus embarcaciones este viernes 1 de abril, por lo que se espera que más de 500 navíos zarpen del puerto de abrigo en busca de mero
Desde las 8:00 horas trabajadores arribaron al puerto de abrigo para alistar sus suministros / Jesús López

El sector pesquero del puerto de Progreso ha comenzado con los preparativos de cara a la temporada de mero 2022-2023, donde se planteó como meta llegar a las 6 mil toneladas y rebasar la del ciclo pasado, donde se obtuvieron 5 mil 300 toneladas de este ejemplar que alcanzó también un precio histórico, 310 pesos para el “negrillo” y 270 para el tipo “rojo”.

Alrededor de 4 mil pescadores retornaron a sus embarcaciones, mismas que sólo en el ámbito de navegación mayor se estiman alrededor de 500 navíos que en estos días se “armarán” para poder zarpar rumbo a altamar el viernes 1 de abril, día en que se levantará la veda del mero.

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En el caso del puerto de abrigo, desde las 08:00 horas se formó una larga fila en el único puesto de control de acceso para pasar el filtro, a cargo de personal de la Administración del Sistema Portuario Nacional (Asipona).

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A la entrada de los móviles se avistó movimiento continuo con paleo de carnada, almacenamiento de víveres, transporte de bidones de diésel y últimas reparaciones a cargo del equipo de mantenimiento de los navíos.

Parte de los inconvenientes que aseguraron los patrones entrevistados en el puerto de abrigo, atenta contra su economía son las alzas de insumos y herramientas que utilizarán en altamar, pues las inversiones van de los 180 mil a los 250 mil pesos por barco, dependiendo de las dimensiones.

“Ahorita nos toca a los pescadores asegurar la inversiones de los permisionarios, en nuestro caso se juega un gasto de 180 mil pesos, donde el pago más caro se hace con el diésel que para un viaje de 15 días ameritan tres y media toneladas”, explicó el quincuagenario Idelfonso Uvalle, tripulante desde hace más de 40 años del “Valeria Teresita”.

El pescador yucateco agregó a su comentario que otro factor que podría perjudicar el arranque de esta temporada es el furtivismo, donde no solo se pone en riesgo el ejemplar mencionado, sino también el pulpo, el cual tendrá su periodo de captura hasta el segundo semestre del año en curso.

También se averiguó que los anticipos por el momento son apenas una tercera parte de lo que se otorga en tiempos de molusco, así como también en cuanto a los tripulantes que acuden por esta pesquería, ya que los barcos contarán con flotas de cuatro a ocho hombres de mar que recibirán hasta 7 mil pesos de pago antes de abordar el barco, este viernes.

“No se gana lo mismo, la verdad es que el mero solo amortigua el gasto para el pescador, en lo que empieza la pesca de pulpo que implica la verdadera ganancia para el gremio. Ahorita lo que a mi parecer nos afecta, aparte de la economía, es el censo que cada vez sube más, somos demasiados y hay poco volumen en altamar, antes el mero era el favorito, pero cada año ha bajado aún más su presencia y por ello es que dejó también de comercializarse, la explotación condenó a la especie”, manifestó Omar Canché.

Otra embarcación, pero de mayor tamaño que se encontraba en vías de preparación fue “Reina Patricia”, cuyos trabajadores se enfocaron en embolsar 4 mil kilogramos de sardina y bonito, especies favoritas para la carnada en busca del mero.

“Nosotros invertimos 250 mil pesos, es un gasto mayor por las dimensiones del barco, en la carnada se amerita invertir hasta 25 mil pesos. Esperemos nos pueda ir bien, para que el zarpe sea redituable yo calculo que se necesitaría pescar una tonelada con 800 kilos, de lo contrario habrán bajas económicas para los dueños de los barcos y comenzarían las afectaciones”, explicó el patrón Joaquín Miranda.

Información de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca) sustenta que esta época constituye una las principales alternativas de pesca para el litoral del Golfo de México y Mar Caribe, zona del país en la cual Yucatán contribuye con el mayor volumen de captura, con el 70 por ciento de la producción nacional.

La época de más auge de esta especie se remonta a la década de los años 70 cuando el mero rojo (epinephelus mori), registraba hasta 20 mil toneladas por año, convirtiéndose en aquellos años, en el 90 y 95 por ciento en la composición de la captura total de escama en México.

En la última década, uno de los años con más redituabilidad fue el 2017 donde se lograron obtener a nivel sureste 10 mil 768 toneladas, siendo Yucatán la Entidad con más aporte gracias a sus 7 mil 111 toneladas de producto, mientras que Veracruz, Tabasco, Campeche y Quintana Roo, en su conjunto aportaron 2 mil 106 toneladas.

Pese a que el 2020 fue el peor año para quienes se dedican a la pesca, al menos el mero aportó en Yucatán una producción de 5 mil 551.90 toneladas en peso vivo con un valor de 335.74 millones de pesos.

Por su parte, cerca de 50 congeladoras que se encuentran en el municipio, la actividad del mero atraerá a cerca de mil empleos en distintas ocupaciones que se perdieron en épocas de veda.

“La mayoría de las plantas procesadoras no trabajan ningún producto durante la veda y utilizan ese periodo para dar mantenimiento a su equipo. Los grupos de fileteros y deshuesadoras prácticamente se quedan sin empleo durante la veda, ya que trabajan a destajo”, explicó Fued Zacarías Solís, gerente general de la empresa ZAZO.

En cuanto a las ganancias por exportación, el principal mercado se centra en Estados Unidos, donde gustan de este tipo de pescado con base en sus características como el tener seis gramos de grasa por cada 100 gramos de porción comestible, eso sin olvidarse que aporta proteínas y vitaminas del grupo B como B2, B3, B6, B9 y B12, magnesio, fósforo y potasio.

“Esperemos que la demanda sea buena y así mantener un buen precio para los armadores y pescadores. La mayoría de las plantas arrancan su temporada desde ahorita y la empatan con la de pulpo, para no dejar de trabajar hasta enero del siguiente año, que termina la temporada de escama”, finalizó.

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CC