El puerto El Cuyo, emporio con incalculable riqueza natural, denominado por los mayas como: Cuchcabaloob de Chikinchel, es un paradisiaco lugar con importante infraestructura hotelera y restaurantera, lo que no solo es un atractivo para el turismo nacional e internacional, sino que además se ha convertido en zona de residencia de personas de distintas nacionalidades como estadounidense, canadienses, españoles, italianos y asiáticos.
El Cuyo es una pequeña población de pescadores del Estado con aproximadamente 3 mil habitantes, situado en el extremo Noreste de la Entidad, limitada por el estado de Quintana Roo; actualmente cuenta con cerca de 20 hoteles que prestan servicios a los turistas nacionales y extranjeros, con igual número de restaurantes o sitios para degustar su amplia gastronomía, aseguró la comisaria Neydy Yolanda Puc Gil.
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Sus inicios se remontan a un rancho llamado Cuyo de Ancona, un puerto maderero de relevancia donde los buques nacionales y extranjeros arribaban en busca de madera, sal, entre otros granos. Aunque también fue utilizado como clave para el narcotráfico marítimo, que se convirtió en la forma más común de los grupos criminales para traficar cocaína. Todo eso ha quedado atrás y actualmente se perfila como uno de los destinos más importantes en el Litoral Oriente de Yucatán donde se promueve el turismo sustentable.
El Cuyo fue un puerto maderero de relevancia; por sus aguas profundas, buques nacionales y extranjeros buscaban madera de los bosques nororientales, que junto con el intercambio comercial y la explotación de las charcas salineras constituyó un emporio por tanta riqueza.
En la época prehispánica, El Cuyo se ubicó en lo que los conquistadores hispanos llamaron provincia y los mayas Cuchcabaloob de Chikinchel, probablemente como cabecera Chauac–ha. El Cuyo tiene un asentamiento arqueológico de IV rango y actualmente sobre el sitio maya se asienta el pueblo
La primera mención de este puerto tuvo lugar en el siglo XVI, cuando el comisario de la orden franciscana, Fray Alonso Ponce, se refiere a Ku de Chuacan; en mapas antiguos se hace referencia al sitio como Vigía Puerto del Cerro (donde actualmente se encuentra el faro), que fue utilizado para vigilar la costa de los piratas que pudieran internarse a tierra
El Cuyo cuenta con 16 estructuras arqueológicas registradas en el 2015; cuando se hacían ampliaciones de la red de agua potable fueron descubiertas en la periferia Sur del poblado y se localizó otra construcción prehispánica en un islote, en la Ría, de ahí la importancia actual de conservar sus recursos naturales y vestigios arqueológicos, por lo que las autoridades buscan promover un turismo sustentable, completamente amigable con la naturaleza.
La comisaria Neydy Yolanda Puc Gil explicó que El Cuyo se utilizó como clave del narcotráfico marítimo por grupos criminales para traficar cocaína que recalaba en las orillas de las playas; sin embargo, por la vigilancia esta actividad ilícita ya no continuó, y se busca que con la llegada del turismo también se eviten las distintas formas de consumo de drogas en la localidad y se siga conservando la tranquilidad que actualmente gozan los pobladores y extranjeros que han hecho de este lugar su propio hogar.
Actualmente, el puerto cuenta con infraestructura hotelera y sitios donde se oferta alimentos apegados al cuidado de la naturaleza, lo cual ha sido el principal atractivo para personas de distintas nacionalidades como estadounidense, canadienses, españoles, italianos, asiáticos, que se han hecho de El Cuyo su hogar.
La Comisaria municipal mencionó que los extranjeros que aman esta tierra también han estado contribuyendo con el crecimiento sustentable del pueblo, pues han sido impulsores de varias acciones, entre ellas el mejoramiento del suministro del agua potable, la promoción y apego al cuidado de los mares, de Ría Lagartos y de un sinfín de recursos naturales con los que cuenta el puerto. Además, la pesca continúa siendo una de las principales actividades que mueven la economía del puerto.
El Cuyo se perfila como un puerto donde se promueve el turismo ecológico y puede ser uno de los destinos turísticos más importantes del país por su riqueza natural, cuyos habitantes buscan a toda costa conservar el lugar con construcciones que no interfieran en la imagen y no se altere la flora y la fauna, que hacen de este sitio un lugar simplemente maravilloso.
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CC