Hasta el momento los socios de la Cámara Nacional del Comercio Pequeño (Canacope) no se han visto afectados por los préstamos 'gota a gota'. Se sabe que de los más de mil agremiados sólo 2 o 3 han caído en estos créditos, a esas personas se les apoyó y salieron del problema, dijo Jorge Cardeña, presidente de la agrupación.
“Los agremiados evitan este tipo de préstamos para no verse afectados, en su tiempo se llegó a hablar de dos a tres comerciantes que participaron, pero son muy contados, en su momento se les asesoró, apoyó y salieron del problema, quedaron escarmentados y ya no se volvieron a meter en eso”, comentó.
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Agregó que ellos también han solicitado préstamos, pero únicamente los que ofrece el Gobierno estatal, son en los que más confían.
Por otra parte, en cuanto al aumento de precios, dijo que han tenido afectaciones, sobre todo porque se están haciendo arreglos para seguir compitiendo, salir adelante y no perder ventas.
Sacrificándose hasta en 15 por ciento las ganancias, porque si suben significa ahuyentar al cliente.
“Si mantenemos los precios el cliente va a seguir consumiendo al pequeño comerciante, aunque preguntamos por qué suben los precios si no hay razón. Por otro lado, a finales de junio y ahora en julio prácticamente ha habido alza en pan blanco, enlatados, galletas, hablamos de un 20 por ciento aproximadamente”, añadió.
Como POR ESTO! informó, quienes recurren a los préstamos gota a gota no sólo pierden su dinero, sino su tranquilidad y a veces hasta la vida, se sabe que quienes solicitan este tipo de créditos son comerciantes ambulantes, establecidos, amas de casa y más, quienes están urgidos de dinero y no pueden acceder a financiamiento bancario.
Forma de operar
Entregan sus tarjetas en pollerías, cremerías, tienditas, tortillerías, hasta en negocios de telefonía celular y otros, pidiendo una identificación oficial para corroborar el domicilio de quien pide el dinero, lo entregan en minutos y ahí empiezan las extorsiones, los montos que ofrecen van desde 500 hasta 20 mil pesos, corroboran el domicilio para después acudir a hacer los cobros y extorsiones. Según ellos, esta medida se debe a que te cobran pocos intereses, pero en una semana las personas ya deben el doble y en dos semanas más del triple, algo imposible de pagar.
Los préstamos gota a gota surgieron en la década de los 90 en Colombia; sin embargo, esta modalidad en la actualidad se presenta en 16 países en Latinoamérica y en varios Estados de México, incluido Yucatán y sus municipios, como Mérida y Tizimín.
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CC