La zona costera de Progreso se convirtió en escenario de estudio durante la tarde de este martes, para que autoridades diversas emprendan un operativo a fin de realizar la necropsia a la cría de delfín tipo "nariz de botella" que el pasado fin de semana recaló sin vida a la playa de la comisaría de Chelem.
La llegada de elementos de la policía ecológica a la entrada "Faro" fue justo al mediodía de este martes, procediendo a desenterrar el ejemplar de apenas 1.50 metros de largo y menos de 70 kilos de peso. Juana Dzul Joch, bióloga de la corporación y encargada de dirigir a los agentes, indicó que este delfín apenas se encuentra en la etapa inicial y ha sido el más pequeño que ha varado en lo que va del año.
Por su parte, los estudiantes y el doctor Arturo Hernández, a cargo del Programa de Investigación y Conservación de Mamíferos Marinos de Yucatán (Piccmy), procedieron a realizar la extracción de órganos al animal marino, mismo que ya tenía varios días en estado putrefacto antes de llegar a la costa de este municipio, según declaró la bióloga de la policía ecológica.
Cabe mencionar que la presencia de todos los especialistas atrajo las miradas tanto de residentes de esta zona como turistas que ejercían caminatas en la playa, por lo que no faltaron los curiosos que se acercaron a tomar evidencia de la necropsia, pues este tipo de actividad tenía al menos siete meses que no se llevaba a cabo.
Debido a que el delfín nariz de botella” (Tursiops truncatus) tenía medidas menores a diferencia de otros ejemplares que vararon en el primer trimestre del año, la intervención de estudiantes y agentes ecológicos duró menos de dos horas.
Los resultados para saber la razón por la cual recaló el mamífero a Chelem, podrían durar hasta una semana. Todo dependerá del tiempo que amerite el Piccmy para estudiar los órganos que fueron extraídos del interior de este cetáceo.
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JG