Cargados de promesas y con la ilusión de llegar a Progreso para visitar la majestuosidad de la capilla de Guadalupe o la parroquia principal, sorprendió en la antesala de este fin de semana, el arribo de antorchistas guadalupanosprovenientes de otros municipios e incluso estados del interior de la república, por medio de generosos grupos que adentraban incluso menores de edad que guardan fervor por dicha figura religiosa.
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En estos primeros días del mes de decembrino, el “parque de independencia” y la entrada de la “parroquia de la purísima concepción y san José” (a pesar de que se encuentra cerrada durante gran parte del día), ha funcionado como refugio para varios fieles creyentes que trazan en su camino al puerto como parte de sus travesías.
Este fue el caso de los hermanos Cimé, quienes junto con sus amigos Juan Rosado y Luis Rincón, arribaron esta mañana al municipio desde el puerto de Tulum, Quintana Roo, llevando consigo una imagen enorme de la “Virgen de Guadalupe”.
Ramiro Cimé, en compañía de sus hermanas Guadalupe y Yuliana, esta joven de solo 18 años de edad; externó que los tres se encaminaron a esta ruta por primera vez, partiendo de su natal Tulum en punto de las cinco de la tarde del jueves de esta misma semana.
“Fue difícil abandonar nuestro municipio. Para mí lo fue porque deje a mi hijo Pablo de tan solo siete meses de nacido. Como consanguíneos, nos motivó un retiro que tomamos en días cercanos a diciembre” externó el joven de 21 años de edad, quien de paso externó que uno de los municipios donde se enfrentaron a las adversidades fue en Valladolid, debido a que las altas temperaturas repercutió en los integrantes de este grupo y ameritaron conseguir refugio en una tienda de conveniencia.
“Por más difícil que sea el panorama, si hay fe se logra cualquier cosa”
Otros quintanarrenses que decidieron dejar sus hogares y arriesgar el físico fue el grupo “Ángeles Guadalupanos”, cuya partida fue desde el municipio Tres Reyes a mitad de esta semana a fin de llegar el viernes a Progreso, municipio que en específico fue la meta para ocho adultos y cuatro menores de tres a cinco años de edad.
El conjunto, el liderado por los hermanos Edgar y Wilbert May Angulo, que luego de cerca de una década de correr y manejar bicicleta en las carreteras yucatecas, decidieron hacerlo en este 2023, hombro a hombro con familiares y un par de amigos cercanos, uno de ellos con el papel de chofer a bordo de un automóvil para velar por la integridad de los antorchistas.
Maya hablantes llegan desde comisaría de Chemax
Otros mayahablantes que hicieron evidente su fervor a la virgen de Guadalupe fueron los “Soldados de la divina luz de María”. Este es uno de los mayores conjuntos, pues adentra a un total de 24 pobladores que llegan desde Xcatzín, comisaría del municipio de Chemax, Yucatán.
El grupo tiene como líder a Edgar Herrera Chí y Carlos Be Chí, ambos con edades menores a los veinte años de edad, pero centrados en cumplir con su objetivo de prender una veladora en cada parroquia que visiten como signo de su aventura por medio de la fe.
“Como jóvenes estamos muy emocionados de venir aquí. Por supuesto queremos dar gracias a la virgen de Guadalupe que nos ha acompañado. A la gente que se encuentra en malos pasos, le pide acercarse al buen andar” declaró Edgar Herrera, estudiante de educación básica.
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AA