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Yucatán

Paraíso Sisal: Científicos le declaran la guerra a los Campos Agüero; frenarían el ecocidio

Desde su trinchera, investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México iniciaron las acciones para combatir el “saqueo” del patrimonio natural que realizan los hermanos Víctor y Daniel Campos Agüero, quienes mandaron colocar geotubos para llevar arena a su molino
Investigadores se unieron para hacerle frente a los abusos del desarrollo inmobiliario
Investigadores se unieron para hacerle frente a los abusos del desarrollo inmobiliario / Por Esto! Web

Mientras en Paraíso Sisal avanza la voracidad por comercializar en millonarias tarifas más de 400 lotes a la orilla de la playa, sin importarle a los empresarios inmobiliarios los graves daños que causan al medio ambiente, científicos de la UNAM han emprendido una nueva lucha: crean estrategias para revertir todo lo que el Cártel de Sisal ha destruido. Son un nuevo contrapeso frente al ecocidio.

Por lo pronto, ya se concretó la primera acción de los científicos en Yucatán, preocupados por la devastación que causa el complejo inmobiliario de lujo de los hermanos Víctor y Daniel Campos Agüero: terminaron un estudio del daño que ocasionan los geotubos que los empresarios usan para embutir la playa con la intención de beneficiar su proyecto de vivienda, y ya tienen una serie de propuestas para “remediar” la afectación que se observa en la playa de la Reserva Estatal El Palmar.

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Una de las alternativas de los investigadores del Laboratorio de Ingeniería y Procesos Costeros de la Universidad Autónoma de México (UNAM) es instalar bombas de arena, precisamente donde está Paraíso Sisal, para “devolver” el sedimento que la estructuras están socavando, informó el investigador Carlos Rosas Váquez, de la Unidad Sisal de la máxima casa de estudios.

¿Por qué se dice que Paraíso Sisal es una bomba de tiempo?

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Los investigadores ya habían anticipado que no se quedarían de brazos cruzados ante la voracidad del Cártel de Sisal. La doctora en Ciencias María Patricia Guadarrama Chávez, investigadora ambiental, también adscrita a la Unidad Multidisciplinaria de Docencia e Investigación de Sisal, Yucatán, ya había advertido que los científicos están preocupados por lo que ocurre en la costa Norponiente de Yucatán, donde los Campos Agüero han lotificado y comercializan terrenos, cuya mayoría ha sido adquirida por extranjeros y personas de fuera de Yucatán.

La voracidad empresarial ha dañado no sólo a los sistemas ecológicos cercanos al manglar, sino que también hay impacto en la costa que es erosionada por la pérdida de las dunas que, precisamente, dan protección a la zona del litoral.

Ante ese panorama, científicos de la UNAM, según informó la doctora Guadarrama Chávez, están haciendo “todo lo posible” para ayudarse y frenar la devastación; “siendo optimistas, podemos lograr revertir esto que está ocurriendo”, comentó, en entrevista exclusiva para POR ESTO!

En su caso, la experta reveló que está desarrollando un proyecto “de análisis de la vegetación en esa zona, para tener más elementos para dar una propuesta de conservación o de restauración”. En pocas palabras, los científicos se unieron para pelear por arrebatarle a los empresarios el área costera con flora y fauna indispensables para la vida.

Ecología alterada

Pero no es sólo eso lo que realizan los investigadores de la UNAM en su lucha por hacerle contrapeso a los daños en el medio ambiente causados por el Cártel de Sisal. Hay una nueva acción que revela en entrevista Carlos Rosas: en un proceso de investigación de campo, los científicos colocaron barreras de diferentes materiales, videograbaron y monitorearon el “comportamiento” del ecosistema para registrar los cambios que se registran en las playas de Paraíso Sisal. Los resultados confirmaron su hipótesis: las estructuras colocadas por los dueños en la ex Reserva Natural alteraron el equilibrio ecológico, así como los ciclos de vida de la biodiversidad en esa zona.

Aunque los resultados completos los darán a conocer oficialmente en los próximos días, el estudio adelanta que, de acuerdo con la dirección de las corrientes marinas en Sisal, cuando se colocan barreras para detener la arena, ésta se retiene de un lado y se elimina del otro: “Como sucede en la dársena, que en el lado Oriental hay acumulación, mientras que en el Occidental la corriente socava la arena y esto modifica profundamente la estructura de la playa”, explicó.

Dijo que este efecto es evidente en ese puerto por la construcción del desarrollo inmobiliario Paraíso Sisal, aunque no exclusivo: está sucediendo en toda la costa yucateca en localidades como Chuburná, Progreso, Chelem y Telchac.

“Gracias a la meticulosidad del experimento, los especialistas lograron establecer con precisión el comportamiento de las corrientes marinas en la zona y el impacto que esta tiene en la costa”, abundó.

Con la evidencia, los especialistas conformaron una serie de propuestas de acciones que ayudarán a mitigar el deterioro de la playa del lado Oeste de las dársenas o de las estructuras, una de las cuales es instalar bombas de arena que “regrese” el material, esto con la finalidad que uno de los lados no se socave, explicó.

Avance marino imparable

Hace unos días, publicamos que el mar está devorando a razón de uno a tres metros por año la playa en la zona donde se ubica el complejo inmobiliario Paraíso Sisal y está a nada de “comerse” las edificaciones que ni siquiera están terminadas, según Christian Appendini, especialista en Ingeniería Hidráulica, también de la máxima casa de estudios del país.

“En zonas donde se están ya construyendo, vemos que ya ha retrocedido la playa. Podemos pensar que las obras, en este caso una palapa, ya empieza a estar en una zona vulnerable donde en algún momento va a estar afectada por la erosión y eso es que todavía ni siquiera está terminada la construcción. Es una zona de mucha alteración”, explicó en su momento.

La opinión del experto refrendó la advertencia de David Canul Rosado, supervisor del proyecto para la oficina Sureste de la organización ambientalista Ducks Unlimited de México AC (Dumac), sobre la desaparición de la primera duna costera. En los primeros años del siglo, al concebirse el complejo de viviendas de lujo, se proyectó sobre la segunda duna, a unos 40 metros de la línea costera; sin embargo, esa distancia ya se redujo y las construcciones están a un paso de quedar dentro de la Zona Federal Marítimo-Terrestre, sobre la que no puede construirse.

Por lo pronto, los expertos del Laboratorio de Ingeniería han compartido con colegas de la unidad de investigación Sisal UNAM cómo funciona el sistema y cómo contribuye al equilibrio a la zona de la costa.

“Otra de las ventajas que lo hacen viables es a nivel económico, ya que no se requiere una inversión importante para ponerlo en funcionamiento, sino más bien de la voluntad”, declaró.

Componendas del Cártel de Sisal

POR ESTO!, ha publicado ampliamente y a detalle las componendas de los hermanos Víctor e Iván Campos Agüero para edificar un complejo habitacional en una zona que fue parte de la Reserva Estatal El Palmar, decretada por el gobierno de Patricio Patrón Laviada. Inconformes con una decisión que beneficiaba el medio ambiente del Estado, los empresarios se ampararon, apoyados por funcionarios de dudosa calidad moral, obtuvieron un amparo que derivó en el “decretazo” (el Decreto 293) emitido en 2010 para excluir una gran extensión de terreno del área natural protegida y poder construir un complejo inmobiliario.

La entonces gobernadora de Yucatán, Ivonne Ortega Pacheco, apoyada en sus colaboradores de la Secretaría de Gobierno estatal, Víctor Manuel Sánchez Álvarez, y el de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (Seduma), Eduardo Adolfo Batllori Sampedro, prácticamente le entregó la superficie costera de lo que hoy es Paraíso Sisal a los empresarios.

En 2018, respaldados por el entonces delegado de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Hernán José Cárdenas López, los empresarios recibieron el aval del Manifiesto de Impacto Ambiental (MIA) número 31YU2017UD085, que dio luz verde a la “Urbanización, electrificación, ampliación de camino existente y apertura de un nuevo camino de acceso para un predio formado por los tablajes catastrales: 1896, 2888, 2889, 4803 y 5565 denominados Paraíso Sisal, ubicado en el puerto de Sisal, comisaria de Hunucmá, Yucatán”.

Después, en agosto de ese año, la dependencia federal emitió el oficio 726.4/UGA-0617/0001454, para autorizar la “Construcción y operación de una casa habitación” en el lote 5222 del “proyecto de lotificación Paraíso Sisal, en la comunidad de Sisal, Yucatán”. A partir de ahí, la Inmobiliaria El Palmar de Sisal, S.A. de C.V., inició la venta de los lotes.

Sin embargo, en El Palmar se están perdiendo metros de playas que son hábitat de cientos de especies, lo que ha preocupado a los sectores académico, social y político de la entidad. Ahora, los científicos han tomado la batuta de la lucha para contrarrestar al Cártel de Sisal, en una guerra que apenas comienza…

Continuará…

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CC

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