Una persona de unos 50 años de edad falleció ayer dentro de una casa que le había prestado un compañero de trabajo, pero lo que llamó la atención de las autoridades fue que según vecinos, el ahora occiso llevaba unos días de sentirse muy mal y tosía demasiado, lo cual alarmó mucho a la gente ante la pandemia que se vive en el mundo.
Ayer, un hombre que trabajaba como personal de seguridad privada murió dentro del predio número 780-B de la calle 51-A entre 98 y 100 de Ciudad Caucel, donde las autoridades acordonaron el predio y no permitían que la gente pase cerca, sino en la banqueta de enfrente, por si acaso, decían.
A las 18 horas arribó al lugar personal del Servicio Médico Forense para el levantamiento del cuerpo por lo que se colocó otro cordón de seguridad, de modo que se cerró la calle por completo y la gente que nada tenía que hacer por ahí fue desalojada.
En el lugar había patrullas de la SSP, elementos de la Policía Estatal Investigadora, de la Fiscalía y compañeros de trabajo del occiso, así como personal de salud. Ya la autopsia confirmará la causa de muerte del infortunado.
Un señor que pasaba y que tiene su casa en la esquina, a tan sólo dos casas de donde se registró el deceso, al enterarse de los hechos, con la misma se retiró, ni siquiera entró a su casa.
(Luis Tamayo Mendicuti)