Por Julio Javier Mena
CHETUMAL, 18 de abril.- Personal del área de Fiscalización del municipio junto con elementos policiales clausuraron un establecimiento clandestino denominado “El Bar de Forkys”, ubicado en el cruce de la calle 27 de Septiembre con avenida Maxuxac, colonia Proterritorio.
Según comentan los vecinos, este bar funcionada de manera irregular debido a la complacencia de las autoridades municipales y policiales, las cuales pasaban por “su mordida”, por lo que funcionaba a deshoras y como quisiera, incluso laboraban con la emergencia sanitaria que se vive, pero la inconformidad de los vecinos terminó en una denuncia y cierre de este bar clandestino.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 20:00 horas, cuando un grupo de vecinos se acercó a la patrulla que se encontraba en el operativo de sana distancia, ahí le comentaron a los policías su preocupación y denunciaron a los propietarios de este bar.
Ya que había personas reunidas en el interior y permanecían ahí hasta altas horas de la madrugada y debido a la emergencia sanitaria que se vive, los vecinos tenían el temor de que esto se convierta en un foco de infección.
Los elementos policiales llamarón al personal de Fiscalización del municipio, mientras estos discutían qué hacer, las personas que se encontraban en el interior del establecimiento escaparon por una puerta lateral.
La lentitud de los elementos policiales y del personal del área de Fiscalización del municipio hizo que las personas que se encontraban infringiendo las normas sanitarias escaparan, posteriormente el personal del municipio colocó unos sellos de clausura a este bar clandestino y luego se retiraron.
Según comentaron los testigos del hecho, hace dos meses y medio el personal del municipio clausuró este establecimiento, ya que el lugar permanecía abierto hasta altas horas de la noche sin tener los permisos adecuados, pero a los pocos días abrieron y comenzaron a funcionar de manera clandestina a la vista de todas las autoridades.
Los vecinos, quienes prefirieron guardar el anonimato, comentaron que cada semana pasaba el personal de Fiscalización del ayuntamiento y de la Policía Quintana Roo por dinero que les daban los propietarios para evitar algún tipo de clausura o denuncia.
Esto como muestra de la creciente impunidad y corrupción que existe en el ayuntamiento capitalino; sin embargo, la emergencia sanitaria que actualmente se vive permitió la clausura de este lugar, el cual alarmaba a los vecinos.