Los accidentes retornaron a la carretera Mérida-Progreso, ahora con una colisión que dejó a dos afectados, quienes corrieron el riesgo de recorrer este tramo a bordo de una motocicleta, pues a lo largo del año se ha presentado constantes percances.
El choque ocurrió en el kilómetro 34, justo a escasos metros de la entrada al puerto cuando una camioneta de la marca Nissan pick up estaquitas con placas de circulación locales YU-5233-C tuvo contacto en la parte delantera del copiloto con una motocicleta que portaba matrícula 88DKA4.
Como consecuencia, los dos jóvenes que viajaban en el móvil de dos ruedas terminaron cayendo de manera violenta, pues ambos vehículos mantenían previo al choque, velocidades por encima de los 70 kilómetros por hora con la intención de arribar al puerto.
Enseguida, se tuvo la llegada de las autoridades policiacas, quienes procedieron a asegurar el área, ya que en este último kilómetro de carretera solo se cuenta con dos carriles en donde transitan tráileres de carga y descarga aparte de decenas de automóviles y medios de transporte.
Los afectados tuvieron diversos golpes en todo el cuerpo, aunque quien se avistó con el peor estado fue el conductor veinteañero que presentaba incluso un par de cortes en la cara y brazo derecho. Por ello necesitaron atención de paramédicos de la Cruz Roja delegación local y de la secretaría de seguridad pública.
En cuestión de minutos el tramo de acotamiento donde se realizaban los protocolos correspondientes se vio invadido por camionetas de la Guardia Nacional, la SSP y la Dirección de Seguridad Pública y Tránsito Municipal, pues tras llevarse a los jóvenes al hospital persistió una discusión entre el conductor de la camioneta Nissan con los familiares del motociclista y su acompañante.
Por una parte, el automovilista expresaba que la culpa fue de quienes circulaban en la moto, ya que invadieron su carril y golpearon uno de sus retrovisores. Se argumentó incluso que el vehículo con manubrios tenía una llanta inservible y por ello resultó complicado el control del móvil para su dueño.
La contra parte argumentaba que fue el conductor de la camioneta el culpable de invadir el acotamiento donde estaba transitando sin mayor problema la moto. A pesar de que la discusión se tornó agresiva, todo quedó en un intercambio de palabras y se llegó a un arreglo por medio de la autoridad presente.
Lo lamentable fue que los dos agraviados al menos durante una semana tendrán que abstenerse a viajar en motocicleta por la recuperación que ejercerán estos días.
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GC