El Ayuntamiento de Bokobá informó que los elementos de la Policía Municipal presuntamente involucrados en la agresión a un hombre, fueron dados de baja tras las investigaciones a cargo de la Fiscalía General del Estado (FGE) con sede en Motul.
Mediante un comunicado, el Ayuntamiento de Bokobá indicó que los elementos policiacos involucrados en presunto abuso de autoridad serán investigados por la FGE, donde la autoridad municipal estará apoyando.
Tal y como se informó, un hombre de 44 años de edad, quien fue identificado como Erwin Enrique K.K., fue presuntamente agredido por agentes de la Policía Municipal de Bokobá, y luego abandonado dentro de la maleza a la vera de un camino de terracería que conduce al municipio de Motul.
Según versiones de pobladores, Erwin estaba sentado frente al cementerio de esa localidad, cuando una patrulla municipal llegó al sitio. Los agentes, presuntamente, lo esposaron, subieron a la camioneta y lo golpearon en todo el cuerpo. Posteriormente, lo llevaron y arrojaron en la maleza, en el kilómetro 2 del tramo Bokobá-Kopté.
Al recibir el aviso, familiares del hombre se dirigieron a la Comandancia de la Policía Municipal para pedir ayuda. Sin embargo, les fue negada. Ante eso solicitaron apoyo a través de los números de emergencia.
Técnicos en urgencias médicas se dirigieron al kilómetro 2, donde encontraron a Erwin con golpes en varias partes del cuerpo y probables fracturas; además de marcas de esposas en las muñecas. Luego de estabilizarlo lo trasladaron al Hospital General Agustín O’Horán para recibir atención médica especializada.
El lesionado no pudo identificar a los agentes responsables, pero acusó a oficiales municipales de detenerlo por un supuesto robo que se investigaba. Describió a los presuntos agresores como un policía “Gordito” y otro “Güerito”.
A su vez, los agentes municipales negaron que fueran ellos los responsables de la agresión. Sin embargo, los familiares indicaron que en la camioneta de la unidad municipal encontraron una playera negra con el logotipo del aniversario de una iglesia cristiana a la que Erwin pertenecía, regalo de su hermano.
Ante estos hechos, los familiares del lesionado presentaron una denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE), donde se abrió una carpeta de investigación para esclarecer lo que ocurrió y determinar las responsabilidades correspondientes.
Habitantes de la comunidad han externado su preocupación por el presunto caso de tortura policial y piden una investigación exhaustiva para garantizar justicia y el respeto a los derechos humanos.
GC