La mañana de ayer una pareja de adultos mayores se intoxicó al inhalar gas butano, mientras dormían, en su vivienda ubicada en la calle 143 entre 90 y 92 de la colonia Emiliano Zapata Sur III de Mérida.
Una vecina fue quien se dio cuenta de la situación al notar que no despertaban y solicitó auxilio a los equipos de rescate a través de los números de emergencia.
Según los datos obtenidos en el sitio del hecho, el ama de casa adquirió un tanque de gas hace dos días. Sin embargo, reportó a la gasera una fuga en el cilindro. A pesar de sus insistentes llamados, la empresa sólo prometió enviar a un vendedor para revisar el cilindro, cosa que nunca ocurrió. La negligencia en la atención a la fuga de gas se señala como la causa principal del accidente.
En las primeras de ayer, una vecina acudió al domicilio y como la pareja no respondía hizo el reporte a las autoridades policiacas. Arribaron equipos de emergencia, entre ellos bomberos, agentes y técnicos en urgencias médicas de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP). Encontraron a los adultos en estado crítico; los bomberos retiraron el tanque de gas y los socorristas proporcionaron los primeros auxilios a los abuelitos.
La mujer fue trasladada al hospital en estado de salud delicado debido a la intoxicación severa, mientras que, al hombre, aunque en una condición menos grave, también requirió hospitalización. Las autoridades investigan el incidente para determinar las responsabilidades y evitar que situaciones similares vuelvan a ocurrir.
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Habitantes del rumbo han expresado su preocupación por la seguridad en el manejo de cilindros de gas y la eficiencia en la respuesta de las empresas proveedoras ante problemas reportados. Las autoridades policiacas exhortan a los usuarios de gas a revisar las instalaciones y reportar cualquier anomalía de inmediato para prevenir tragedias.
En primera instancia se habló de una presunta explosión del cilindro, pero luego se confirmó que fue una fuga. Familiares de los afectados comentaron que presentarán una denuncia penal contra la empresa gasera que surtió el cilindro, ante la negligencia del servicio.
Alguno de los vecinos externó que a pesar de que la mujer dijo al gasero el mal estado del tanque, el despachador se negó a cambiarlo. Este tipo de situaciones del pésimo estado de los contenedores no es nuevo. Hay quejes constante de que muchos cilindros están muy deteriorados.
Sin embargo, los gaseros prestan nula atención a los reclamos, pero eso sí, cuando un cliente les da un cilindro con óxido o por el uso se nota en mal estado, ellos no lo aceptan. Cuando se les da uno en buenas condiciones a cambio entregan uno peor, sin importarles el costo que tiene esos tanques en el mercado.
Hasta donde se sabe, un cilindro de 20 kilos tiene un costo de al menos mil 700 o más, no hablar de dimensiones mayores. A eso hay que añadir que “vacunan” los contenedores para rellenar otros y obtener mayor ganancia.
Se supone que hay una disposición de que esas empresas renueven sus cilindros, pero eso es letra muerta para los empresarios de ese rubro o los empleados.
En este tenor, en noviembre del 2019, la Comisión Reguladora de Energía (CRE) trabajó en un proyecto de ley para que las empresas de gas LP pudieran solicitar un depósito a los consumidores por cada cilindro de gas.
Respecto a la vida útil de los tanques de gas, se puede considerar que es de 10 a 20 años. Sin embargo, para tener mayor certeza, se puede revisar la placa que hay en alguno de los costados del tanque, ya que en ella se indica la fecha de elaboración.
Para extender la vida útil del cilindro se recomienda hacer un mantenimiento adecuado, como cambiar las válvulas principales y dar mantenimiento a la pintura.
GC