En Campeche ya llega la época de uno de sus frutos más esperados, el marañón, que para muchos resultará extraño, sin embargo, su consumo es más común de lo que podemos pensar.
Físicamente la puedes reconocer por ser un fruto carnoso de color verde, amarillo o rojo (dependiendo de su grado de madurez), así como una semilla externa adjunta en forma de guante de box.
Esta fruta resulta ser muy agradable al paladar, si la encuentras muy madura, de lo contrario es muy astringente para comerla. Algunas veces se licúa para hacer agua fresca, a la par de que se macera en alcohol o ron para hacer el famoso licor de marañón, otras veces se hace dulce, como en especie de mermelada.
Cómo reconocerlo
Si aún te resulta difícil reconocerlo, no te preocupes, para diferenciarlo es fácil, ya que de él sale una protuberancia, color grisácea que tiene una forma de “c” y que ahí se alberga una nuez muy sabrosa que todos conocemos como “nuez de la India”.
Una de las cosas que me sorprenden del marañón es que el árbol debe florecer abundantemente, no de todas las flores se producen frutos y de cada marañón, o especie de perita, solo se obtiene una sola nuez, así que imagina las cantidades de fruta que se requieren para tan sólo obtener 100 gramos de nuez de la India.
Origen
El marañón, Anacardium occidentale, es también conocido por los nombres de anacardo, caguil o merey. Y aunque es originario del nordeste de Brasil y del sur de Venezuela y de Costa Rica, sus frutos crecen en algunas zonas de Tabasco y Campeche.
Con información de México Desconocido
SY