El impago de PEMEX y las obras de pavimentación en la carretera federal 180 en la Península de Atasta han generado una drástica caída de las ventas en restaurantes locales de hasta un 30 por ciento, y aunque las esperanzas para contrarrestar estos efectos eran las posadas, tampoco estos eventos se están realizando.
Así lo dio a conocer Gabriela Cruz Damas, presidenta de la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (CANIRAC) en Ciudad del Carmen, al referir que solo se quedan con el antecedente del año pasado en el que fue para los días cercanos al fin de año que hubo mayor actividad. Pero ante el panorama actual del impago de PEMEX y de la obra de la DEFENSA en las carreteras, todo les juega en contra.
Cuestionada sobre el impacto que ha tenido la falta de pago de PEMEX a empresas locales en los establecimientos de venta de alimentos, mencionó que es una situación que día con día está marcando lo grave que podrá ser en las siguientes semanas y meses, si el tema no se soluciona, ya que vino en picada y hasta ahora sus ventas están en un 70 por ciento.
Por periodo, diciembre siempre es un momento positivo para la actividad por la presencia de visitantes, las vacaciones de los locales y desde luego las fiestas como las posadas. Sin embargo, sucede que las reuniones de los centros laborales han quedado suspendidas, otras se realizan, pero de forma muy austera, por lo que ni este momento les ha servido para mejorar.
Por si fuera poco, todo lo que está jugando en contra de sus ventas, Cruz Damas agregó que, desde que iniciaron los trabajos de reparación en la carretera federal 180 en la Península de Atasta, ha disminuido la presencia de personas foráneas quienes evitan el tramo. Hay quienes pasan, pero al tardar muchas horas en trayecto ya no se detienen en la Isla para comer, sino que van de largo para recuperar el tiempo perdido, y esto también les ha afectado significativamente.
Para la primera parte del periodo vacacional, sus ventas no incrementan tanto, por lo que ahora solo esperan que llegue el fin de año. Porque en diciembre de 2023, fueron esos días donde vieron un notorio repunte, desafortunadamente, el panorama económico por el impago de PEMEX a las empresas de Carmen, saben que seguirá afectando a todos.
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Finalmente, dijo que como sector restaurantero están en la posición de ocuparse, por ello, se unirán a las movilizaciones que sean necesarias siempre y cuando sean conforme a la Ley, todo con el objetivo de que la paraestatal comprenda que esta situación que conocen perfectamente porque ellos la provocaron, la atiendan a la brevedad. Ya que al no abrir un restaurante, por falta de comensales, son mínimo cinco personas trabajadoras del establecimiento las que dejan de tener ingresos para sus familias, esto sin contar el impacto a la proveeduría de insumos para platillos.
JGH