Campeche / Ciudad del Carmen

Piratería y falta de clientes, pone en "crisis" a negocios de mudanzas

Integrantes del Sindicato “16 de Julio” se encuentran al borde de la desaparición ya que aseguran que la piratería y falta de contratos mantiene en crisis el negocio
El Sindicato “16 de Julio”, que se especializa en el traslado de carga, indica que sus agremiados deben dividir sus turnos / Perla Prado

La piratería y la falta de contratos para el envío de mercancías está llevando a los integrantes del Sindicato “16 de Julio” al borde de la desaparición, pues en la actualidad sólo una tercera parte de los agremiados presta servicio y por si fuera poco el cien por ciento duda en renovar la concesión, ante la exigencia de múltiples requisitos imposibles de cumplir.

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José Ángel López Zapata, socio del Sindicato de Camioneros y Transporte, Carga y Descarga “16 de Julio”, explicó que el panorama para quienes hacen mudanzas es más difícil, pues muchos son personas de la tercera edad que han persistido en el oficio ante la falta de empleo para personas sin estudios y sin edad adecuada.

Mayormente, gracias a los pequeños comercios, este sector sigue a flote. / Ricardo Jiménez

A decir del sexagenario, la actividad para el Sindicato del “16 de julio” es baja por la piratería que las autoridades encargadas han tolerado, pero además por la apertura de empresas de paquetería que hacen envíos sin que esto esté permitido.

En la base del sindicato ubicada en la zona de La Puntilla, los 23 socios activos se tienen que dividir por turnos, para garantizar el empleo, ya que actualmente sólo tienen contrato con dos empresas: Protexa y JB; pero esto no les garantiza nada.

“Cuando empiezan, nos dan trabajo; pero después adquieren vehículos y dejan de solicitarnos, solo cuando se les vence el permiso de acceso al Puerto Industrial retoman el servicio; luego, apenas les entregan el pase, de nuevo nos dejan sin contrato. Respecto a otro tipo de comercios, son los que nos mantienen a flote; me refiero a empresas de venta de telas, ropa, zapaterías”, comentó.

La piratería los deja en completa desventaja pues si bien el servicio puede ser más económico, es porque estas personas, con el solo hecho de tener un vehículo, ofrecen el servicio de mudanza, pero no pagan impuestos ni concesiones, que requieren muchos requisitos, que ignoran por completo y la ley se los permite.

Los requisitos que exige el Gobierno para operar es otro factor desfavorable / Perla Prado

López Zapata agregó que desde hace mucho tiempo, las autoridades de Transporte los han estado presionando para que se conviertan en una cooperativa, pero como se han negado están exigiendo requisitos imposibles de conseguir, como el hecho de que tengan secundaria, pues en aquellos tiempos apenas empezaba a funcionar la Unacar con secundaria.

Finalmente, dijo que la falta de trabajo y la exigencia de requisitos para renovar sus concesiones, como cursos de atención al público, antidoping, altas ante el SAT, por lo que, quieren que el Instituto Estatal del Transporte se ponga a ver que están al borde de la extinción y esto terminaría de acabarlos ya que mientras sigan permitiendo la competencia desleal, que en consecuencia disminuye los ingresos no podrán hacer el proceso de revalidación de las concesiones correspondientes a 2024.

Se sabe que la mudanza más grande de la historia, por la cantidad de mercancía cambiada de sitio, ocurrió en 1974, en la ciudad de San Francisco, Estados Unidos. El servicio consistió en cambiar de lugar 12 casas de estilo victoriano, con todo y cosas, a un kilómetro de distancia.

La hazaña duró tres semanas, empleó a más de 100 trabajadores y se usaron 30 camiones de carga.

JY