Un despliegue de policías en la zona Centro causó la alarma entre vecinos, luego de que estos reportaron un auto “sospechoso” el cual tenía polarizado prohibido y carecía de placas, cuyo chofer, al ser interceptado, se tornó agresivo contra los uniformados ya que se negó en una primera instancia a que revisaran su carro.
El hecho ocurrió cuando comerciantes del primer cuadro se percataron de la presencia de un auto de color blanco sin placas, cuyo polarizado impedía ver quién o quiénes iban en el interior. Ante la extraña actitud del conductor, ya que se desplazaba a poca velocidad, decidieron reportarlo al número de emergencias, lo que activó un protocolo de búsqueda donde vieron al coche de la marca Chrysler, línea 200, el cual intentaron detener.
Pero su guiador desobedeció a los policías y huyó, lo que dio inicio a una persecución que culminó en la calle 12 con cruce en la 51, donde los efectivos estatales y turísticos le cerraron el paso. Quienes, al entrevistarse con el conductor, se tornó agresivo e indicó que no tenía por qué brindarle información ni mostrarle la documentación, ya que violentaba su derecho. Pero al paso de los minutos y temer ser asegurado, accedió a mostrar los papeles del auto, lo que descartó que fuera robado.
Así mismo, se inició otra discusión ya que no quería que revisaran el interior, pero accedió a las órdenes de las autoridades, quienes buscaron dentro del coche algún tráfico de sustancias o armas, lo que fue descartado. Pese a ello, aplicaron las multas al dueño del carro por no portar placas y utilizar polarizado prohibido, pero sin el decomiso del coche ya que tenía la documentación en regla.
JGH