Japón inició su campaña de vacunación el miércoles después de que el gobierno otorgó su primera aprobación a la vacuna desarrollada por Pfizer y BioNTech, aunque Estados Unidos y muchos otros países comenzaron desde hace dos meses.
Algunas personas en Japón, en donde los efectos secundarios de las vacunas, aunque poco comunes, tienden a ser exagerados, no tienen prisa en inocularse. Dicha renuencia podría ser un gran problema para los Juegos Olímpicos programados para realizarse en Tokio a mediados de 2021 luego de aplazarse un año. La vacunación es considerada un elemento clave para la realización de la justa.
Con el desarrollo de una vacuna nacional aún en sus primeras etapas, Japón— que depende de las importaciones — enfrenta la incertidumbre del suministro.
Tampoco está claro si los sistemas de salud de Japón, que ya se encuentran agobiados, podrán atender a los visitantes adicionales durante la competencia, mientras hacen malabares con los pacientes locales y las campañas de vacunación a gran escala.
La demora
Se debe a que el gobierno solicitó ensayos clínicos en Japón además de las pruebas realizadas por Pfizer en distintas naciones, entre las que Japón no fue incluida.
Decenas de países aceptaron los resultados que Pfizer difundió en noviembre y continuaron con el proceso. Pfizer solicitó aprobación para uso de emergencia en Japón en diciembre pasado, basándose en datos obtenidos en el extranjero, pero Tokio esperó los resultados de las pruebas realizadas en el país, que se presentaron a finales de enero, antes de finalmente otorgarle luz verde el domingo.
Todo esto sucedió en cuestión de dos meses, un tiempo mucho menor al promedio de un año que acostumbra Japón, un país conocido por su cautela y su burocracia.
El proceso de aprobación para otro proveedor, AstraZeneca, apenas comenzó hace poco, mientras que una tercera vacuna, Moderna Inc., aún no presenta solicitudes en Japón.
La población japonesa suele ser escéptica en cuanto a las vacunas, y las autoridades sintieron la necesidad de atender minuciosamente las cuestiones de inocuidad.
Con información de AP