El portavoz de la Embajada de China en Estados Unidos aseguró que “nadie ganará una guerra comercial o arancelaria” en respuesta al anuncio del presidente electo, Donald Trump, sobre la imposición de aranceles adicionales del 10 por ciento a todos los productos importados de China.
La medida entraría en vigor en enero de 2025, una vez que Trump asuma el poder, y tiene como objetivo presionar a China para frenar el flujo de fentanilo hacia Estados Unidos.
En su plataforma Truth Social, Trump justificó la decisión al señalar que el fentanilo, un opioide sintético responsable de más de 150 muertes diarias por sobredosis en Estados Unidos, proviene de precursores químicos fabricados en China.
Sin embargo, el portavoz chino, Liu Pengyu, desmintió estas acusaciones, asegurando que “la idea de que China permite deliberadamente que los precursores químicos del fentanilo lleguen a Estados Unidos va completamente contra los hechos”.
Además, destacó que desde la reunión entre los presidentes Xi Jinping y Joe Biden en San Francisco el año pasado, las agencias antinarcóticos de ambos países han retomado comunicaciones regulares para abordar el problema.
Tensiones comerciales históricas
Trump, conocido por su postura proteccionista, impulsó una guerra comercial contra China durante su primer mandato, iniciada en 2018.
Como candidato, prometió medidas arancelarias más agresivas, incluyendo tasas de hasta el 20 por ciento para todos los productos importados y hasta el 60 por ciento para bienes chinos, con el objetivo de proteger empleos estadounidenses.
Por su parte, China advirtió que las nuevas tarifas perjudicarían a ambos países y podrían exacerbar las tensiones económicas globales.
“Las guerras comerciales no benefician a nadie”, reiteró el portavoz chino, subrayando que cualquier medida unilateral podría tener consecuencias negativas para las cadenas de suministro internacionales y los consumidores.
Las tensiones entre ambas naciones, que han tenido impactos significativos en la economía mundial, parecen encaminarse hacia un nuevo episodio con la llegada de Trump al poder en 2025.
IO