El Primer Ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ha decidido disolver el Gabinete de Guerra, un mecanismo que se había establecido el 11 de octubre de 2023, para gestionar las decisiones militares en la Franja de Gaza tras un ataque de Hamás.
Fuentes oficiales israelíes confirmaron esta decisión, que había sido anticipada por muchos.
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La disolución se produce una semana después de que Benny Gantz, líder de Unidad Nacional y ex general, junto con su socio Gadi Eisenkot, abandonaran el gabinete debido a desacuerdos con Netanyahu.
La salida de estos miembros dejó vacantes que ahora son demandadas por la extrema derecha.
A partir de ahora, las decisiones críticas sobre la guerra serán tomadas por un foro más reducido.
Este foro incluirá al ministro de Defensa, Yoav Gallant; el ministro de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer; el jefe del Consejo de Seguridad Nacional, Tzachi Hanegbi; y Arieh Deri, líder ultraortodoxo del partido Shas y miembro del círculo de confianza de Netanyahu.
Este nuevo sistema excluye a los dos socios de gobierno de Netanyahu de la ultraderecha: el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, y el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich.
La inclusión de estos funcionarios habría incrementado las tensiones con socios internacionales, especialmente con Estados Unidos.
Ben Gvir, tras la renuncia de Gantz, expresó su deseo de unirse al gabinete, enfatizando la necesidad de tomar decisiones audaces y garantizar la seguridad de los residentes en todas las regiones de Israel.
Ben Gvir es conocido por apoyar medidas extremas como la reinstauración de asentamientos en Gaza y la intervención militar en Líbano.
El Gabinete de Guerra disuelto estaba compuesto por Netanyahu, Gallant y Gantz, quienes tenían derecho a voto, mientras que Eisenkot, Deri y Dermer eran observadores.
Con la salida de Gantz y Eisenkot, el gabinete quedó en una situación insostenible, llevándolo a su disolución.
Gantz y Eisenkot, ambos exjefes del Estado Mayor, pertenecen al partido de centroderecha Unidad Nacional.
Este partido se había unido al gobierno de emergencia formado por Netanyahu debido a la crisis, pero se retiró recientemente debido a desacuerdos sobre la gestión de la situación, particularmente la falta de un plan de postguerra para Gaza.
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