El gobierno de Estados Unidos impuso este jueves 12 de septiembre sanciones contra 16 funcionarios del gobierno venezolano, incluidos miembros del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), el Consejo Nacional Electoral (CNE) y militares, por su presunta participación en la obstrucción del "proceso electoral" y la violación de derechos civiles en Venezuela.
De acuerdo con un comunicado del Departamento del Tesoro estadounidense, las sanciones están dirigidas a personas clave involucradas en las elecciones presidenciales del 28 de julio, donde Nicolás Maduro fue declarado ganador. Washington considera que estos comicios fueron "fraudulentos" e "ilegítimos", además de denunciar la represión de la libertad de expresión en el país sudamericano.
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Justificación de las sanciones
Wally Adeyemo, subsecretario del Tesoro, explicó que la administración de Joe Biden está respondiendo a la represión que siguió a las elecciones. "Estamos apuntando a funcionarios clave involucrados en las fraudulentas afirmaciones de victoria de Maduro y su brutal represión de la libertad de expresión, mientras la mayoría de los venezolanos clama por un cambio", señaló en el comunicado.
Entre los sancionados se encuentran jueces del TSJ, como Inocencio Antonio Figueroa Arizaleta, Malaquías Gil Rodríguez, Juan Carlos Hidalgo Pandares, Caryslia Rodríguez y Fanny Márquez Cordero. También figuran el secretario general del CNE, Antonio José Meneses, y el vicepresidente de la Asamblea Nacional, Pedro Infante Aparicio.
La represión tras las elecciones
Desde las elecciones de julio, el gobierno de Nicolás Maduro ha sido acusado de utilizar tácticas de intimidación y represión contra la oposición y los ciudadanos que ejercieron sus derechos políticos. Según Estados Unidos, estas acciones llevaron al arresto de miles de venezolanos y obligaron al candidato opositor Edmundo González Urrutia a salir del país y buscar asilo en España.
"Maduro y sus representantes han arrestado indiscriminadamente a venezolanos por ejercer sus derechos políticos y civiles", denunció el gobierno estadounidense. Además, acusó al régimen de intimidar a la oposición y reprimir cualquier intento de protesta, lo que ha resultado en 27 muertos, 200 heridos y más de 2,400 detenidos desde que se anunciaron los resultados.
El papel de la oposición
Edmundo González Urrutia, que actuó como representante de la líder opositora María Corina Machado, fue uno de los principales afectados por las acciones del gobierno venezolano. Después de que las autoridades inhabilitaran a Machado, González Urrutia tomó el relevo como candidato opositor en las elecciones. Sin embargo, su victoria no fue reconocida, y finalmente tuvo que exiliarse.
Machado, por su parte, sigue en Venezuela y sostiene que la oposición ganó las elecciones por un amplio margen. A pesar de la represión, sigue denunciando las tácticas del régimen y defiende que los venezolanos tienen derecho a un proceso electoral transparente.
IO
