La Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó este miércoles una resolución que exige a Israel poner fin a su ocupación en los territorios palestinos en un plazo de 12 meses. Con 124 votos a favor, 14 en contra y 43 abstenciones, el texto llama a la retirada inmediata de las fuerzas israelíes y la paralización de nuevos asentamientos en los territorios ocupados.
La resolución, que no es vinculante, responde al dictamen de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) emitido en julio, el cual declaró que la presencia de Israel en los territorios palestinos desde 1967 es ilegal y debe terminar lo antes posible. Además de exigir la retirada de las fuerzas israelíes, el texto solicita la devolución de tierras confiscadas y el derecho de retorno para los palestinos desplazados.
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Postura de Israel y reacciones internacionales
La respuesta del gobierno israelí fue contundente. El embajador de Israel ante la ONU, Danny Danon, criticó la resolución y la calificó de "cínica" y perjudicial para el proceso de paz. Israel considera que esta decisión internacional solo fomenta la violencia en la región. "Cada voto a favor de este circo alienta a quienes rechazan la paz", declaró Danon.
Por su parte, el Ministerio de Exteriores israelí también condenó la resolución, calificándola de "distorsionada" y "desconectada de la realidad", asegurando que solo agrava la situación.
Votos y divisiones en la Asamblea
A pesar del respaldo mayoritario, la resolución no logró el mismo consenso que textos anteriores relacionados con Palestina. Países como Canadá, Australia, India, Suiza y varios europeos decidieron abstenerse debido al lenguaje más duro del documento contra Israel. La votación obtuvo menos apoyo que una resolución previa de mayo, cuando 143 países respaldaron la solicitud de membresía plena del Estado palestino en la ONU.
El texto también insta a los Estados miembros de la ONU a considerar sanciones, como la interrupción de importaciones de asentamientos israelíes y la suspensión de la venta de armas a Israel, si estas pudieran utilizarse en los territorios palestinos ocupados.
La resolución es vista como un nuevo paso en la lucha internacional por los derechos de los palestinos, aunque su impacto práctico dependerá de la disposición de Israel y la comunidad internacional para implementar estas medidas.
IO