La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, anunció que sostendrá una reunión con los gobernadores de los estados fronterizos del norte del país para coordinar un plan que permita recibir a los connacionales deportados, en caso de que se cumplan las amenazas de deportaciones masivas del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, a partir de enero de 2025.
En su conferencia matutina en Palacio Nacional, Sheinbaum señaló que la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, será la encargada de convocar a las gobernadoras y gobernadores de Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas para definir las acciones conjuntas.
“La reunión tiene como objetivo acordar cómo recibir a nuestros paisanos en caso de que haya una deportación masiva. Estamos tomando medidas preventivas para enfrentar este escenario”, declaró Sheinbaum.
Preparación intersecretarial
El Gobierno de México ya trabaja en un plan intersecretarial para atender los posibles escenarios derivados de las políticas migratorias anunciadas por Trump, quien asumirá la presidencia de EE.UU. el próximo 20 de enero. Según el canciller Juan Ramón de la Fuente, este plan será presentado en los próximos días.
Impacto económico y humanitario
El anuncio de Tom Homan, próximo responsable de la política migratoria estadounidense y conocido como el “zar de la frontera”, sobre las deportaciones masivas, ha generado preocupación tanto en México como en Estados Unidos.
Organizaciones de derechos humanos han advertido que estas acciones tendrán repercusiones humanitarias significativas, además de un impacto negativo en la economía estadounidense.
De acuerdo con un informe de la American Immigration Coalition, una deportación masiva podría reducir el PIB de EE.UU. entre un 4.2 % y 6.8 %, con pérdidas económicas estimadas de entre 1.1 y 1.7 billones de dólares anuales.
El Gobierno mexicano reafirmó su compromiso de proteger los derechos de los migrantes y garantizar una recepción digna para quienes pudieran ser deportados. La colaboración con los estados fronterizos será clave para enfrentar este desafío.
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