El virus H5N1, conocido como influenza aviar, se perfila como uno de los temas de salud más relevantes para 2025, según alertó Mauricio Rodríguez Álvarez, vocero del Programa Universitario de Investigación sobre Riesgos Epidemiológicos Emergentes (PUIREE) de la UNAM.
Aunque el riesgo para la salud pública en México es bajo por ahora, las autoridades mantienen un monitoreo constante debido a los recientes cambios en el comportamiento del virus.
Riesgos para la salud animal y humana
El H5N1 ha evolucionado para afectar no solo a aves silvestres y de granja, sino también a otros animales, incluidos mamíferos.
En Estados Unidos, un hombre falleció recientemente tras exponerse a aves infectadas, mientras que Canadá y México han reportado casos aislados en humanos y animales.
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Rodríguez Álvarez destacó que el mayor riesgo lo enfrentan las personas que trabajan en granjas o manipulan animales potencialmente enfermos, aunque subrayó que no hay evidencia de transmisión de persona a persona.
Además, se monitorean aves migratorias en puntos estratégicos de México, ya que estas pueden transportar el virus entre regiones.
Medidas preventivas y recomendaciones
- Consumo seguro: Evitar la leche no pasteurizada, ya que puede ser un vector de infecciones como la influenza H5N1, tuberculosis y brucelosis.
- Vacunación: Se recomienda inmunizar al personal que trabaja con animales para reducir riesgos, al menos con la vacuna estacional de influenza, que ofrece cierta protección cruzada.
- Monitoreo fronterizo: Vigilar el ganado lechero importado de estados estadounidenses como California, Arizona y Texas, donde se han detectado casos en vacas.
Una vigilancia permanente
El sistema de vigilancia epidemiológica en México monitorea infecciones respiratorias como influenza, coronavirus y otros virus estacionales desde 2006.
Este año, la atención se enfoca en la posible propagación del H5N1, cuyo comportamiento podría tener impactos en la producción alimentaria y la salud pública.
Rodríguez Álvarez llamó a mantenerse informados y seguir las indicaciones de las autoridades para minimizar riesgos. “No estamos en alarma, pero sí en un estado de vigilancia activa”, concluyó.
IO
