Por la feria tradicional de José María Morelos en honor al Niño Dios, que inicia el 20 de diciembre, el parque principal de la cabecera municipal se encuentra ocupado por vendedores ambulantes; los organizadores de la fiesta no han tenido el cuidado de instalar en el inmueble público los sanitarios móviles para quienes asistirán a dicho evento, por lo que acuden a los baños de edificios públicos para hacer sus necesidades.
Desde el 15 de diciembre, los comerciantes empezaron a llegar e instalarse en el parque central, algunos de ellos son vendedores de diversos productos, como plásticos, ropa y bisutería; además, arribaron ferieros que traen juegos inflables, mecánicos y mesas de futbolito, entre otros.
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Los juegos mecánicos ocuparon hasta las aceras que rodean al parque, lo que incomodó a los taxistas que tiene un sitio en ese lugar; uno de ellos, de nombre Willy Navarrete, indicó que no debieron autorizar el uso de las banquetas para la colocación de dichas atracciones.
Así mismo, se observó que varios puestos se montaron en áreas verdes del espacio público de José María Morelos, por lo que vecinos de la zona indicaron que los pastos y plantas de ornato en el sitio sufrirán daños debido a la nula regulación en el número de comerciantes.
En años anteriores, se instalaban sanitarios portátiles detrás de la concha acústica del parque central, y además se les abastecía de agua potable.
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CG