
La comunidad de San Francisco Aké se suma a la larga lista de localidades que han reclamado constantemente la deficiencia en los servicios de energía eléctrica. Los habitantes, que superan los 700, denuncian interrupciones de hasta más de dos días, mientras la Comisión Federal de Electricidad (CFE) no ha tomado medidas para mejorar el servicio.
De acuerdo con don Juan Ek, habitante de San Francisco Aké, el problema es recurrente, pasando de simples parpadeos a cortes prolongados de hasta varios días. Esta situación afecta también el acceso al agua potable, ya que las bombas de extracción necesitan energía eléctrica para operar, dejando a la comunidad sin el vital líquido por largos periodos.
La red de energía eléctrica conectada desde el entronque de Melchor Ocampo y la carretera 295 Felipe Carrillo Puerto-Valladolid muestra problemas relacionados con los fuertes vientos que provocan que las ramas de los árboles topen con los cables de alta tensión, generando descargas. Esto causa que las cuchillas se caigan, y los habitantes deben esperar la llegada de una brigada de la CFE para reparar las fallas, trabajo que depende de la subestación de Valladolid.
Además, las altas temperaturas han agravado el problema, acelerando la descomposición de productos perecederos, ya que la falta de energía impide operar los equipos de refrigeración necesarios para su conservación. Esto genera pérdidas económicas y dificultades para los habitantes de San Francisco Aké.