La incertidumbre permanece, en cuanto a la supuesta suspensión definitiva de un juez federal al amparo promovido por la plataforma de trasporte Uber para poder operar, sin placas federales, en el Aeropuerto Internacional de Cancún (AIC).
Como hemos informado, tampoco la Guardia Nacional (GN) ni el Grupo Aeroportuario del Sureste (Asur) cuentan con notificación judicial alguna para permitir que Uber recoja pasajeros en el aeródromo; los propios conductores tienen sus dudas y por ello, algunos prefieren no arriesgarse.
Por su parte, transportistas federales de Cancún, Playa del Carmen y Tulum anunciaron una manifestación para el 31 de agosto, a la entrada y salida del AIC, para exigir respeto y una postura por parte de las autoridades federales respecto a Uber. Advirtieron que el bloqueo durará hasta que las autoridades les den respuesta y, de hacerse, provocará un desquiciamiento de las carreteras que llevan hacia el aeródromo, eso si las autoridades correspondientes no entablan un diálogo previo.
Antecedentes
En Quintana Roo, la plataforma Uber ha sido centro de la polémica, primero porque los taxistas -particularmente de Cancún- les han hecho la vida imposible para evitar que los conductores trabajan libremente. Durante años han sido blanco de amenazas y agresiones.
En marzo pasado protagonizaron otra controversia, cuando decenas de conductores realizaron un plantón en Plaza Azuna, por los actos de violencia e intimidación de parte de integrantes del Sindicato de Taxistas “Andrés Quintana Roo”, pero los representantes de Uber en Cancún, no sólo no los apoyaron, sino que abandonaron las oficinas que ocupaban en el piso 11 de esa plaza.
En la recepción del edificio se colocó un escrito que decía: “Estimado conductor, repartidor de la plataforma Uber, hacemos de su conocimiento que las oficinas de soporte y atención al Driver, ya no se encuentran en ‘nuestras’ instalaciones del edificio Azuna Corporate Center. Esperamos su comprensión, y para mayor información pueden consultar con el soporte de su aplicación”.
Desde hace unas semanas, voceros o representantes de Uber aseguraron que interpusieron un amparo para recoger pasajeros en el Aeropuerto de Cancún, sin necesidad de permisos, concesiones o placas federales, lo que provocó tensión entre los conductores de taxis de las terminales y de otros servicios de pasajeros, incluso con un bloqueo cerca del aeródromo; pero la semana pasada trascendió en redes sociales que un juez federal había concedido la suspensión definitiva a ese amparo, lo que le permitiría a Uber operar sin problemas en terrenos del aeropuerto; sin embargo, hasta este día nadie ha mostrado el documento, ni la plataforma, ni los conductores.
El gobierno estatal confirmó que hasta el momento no se tiene conocimiento del documento o resolutivo judicial, ya que tampoco se ha recibido una notificación sobre la presunta suspensión definitiva de un juez.
Incluso, en redes sociales, los propios conductores de Uber no están seguros de poder operar en las terminales aéreas: “A mí no me da confianza, ¿algún compañero abogado que nos pueda confirmar la noticia?”, se preguntaban.
De hecho, otros operadores han preferido no aceptar viajes desde y hacia el aeropuerto para evitar confrontaciones o la retención de las unidades. Los elementos aseguraron que tienen indicaciones de seguir con los operativos y no permitir que recojan pasajeros; los pueden llevar, pero no abordar.
GC
