Luego del conflicto ocurrido en la Terminal 3 del Aeropuerto Internacional de Cancún (AIC), donde taxistas golpearon a un conductor de la plataforma Uber, y del operativo de la Guardia Nacional (GN), la noche del jueves, para detectar a estas unidades por carecer del permiso federal para subir pasajeros en estas instalaciones, la supervisión continuó ayer.
Los uniformados vigilaron las áreas comunes de la Terminal 2, donde generalmente se estacionan los choferes de alguna plataforma, en este caso Uber.
Uno de ellos fue detectado en el momento en el que los extranjeros abordaban la unidad particular y sin placas federales. Los visitantes no entendían el motivo por el que les pidieron descender del vehículo, al tiempo que los uniformados le explicaban al conductor el motivo por el cual no se le permitía explotar el servicio de traslado en un área federal, sin el permiso correspondiente, además de que su regulación en Quintana Roo sigue frenada.
En este sentido, algunos pasajeros de Uber aseguraron que prefieren abordar las unidades de la plataforma porque consideran que es más seguro. Algunos residentes mencionaron que les parecía ilógica la acción de la GN, ya que durante años han operado empresas “pirata” de transportación y las quejas por estafas han sido muchas, pero a ellas las toleran y no pasa nada, pues siguen operando.
Además, una vez al mes catean a los empleados y prestadores de servicios turísticos que laboran en las distintas terminales, para buscar algún arma o droga.
Es más, turistas nacionales y extranjeros han denunciado a los taxis del aeropuerto por mañosos y ladrones, al cobrarles cantidades exorbitantes por traslados interterminales. Basta recordar el caso del canadiense que hizo viral un video en el que exhibió a un ruletero por intentar estafarlo.
El añejo conflicto entre taxistas y choferes de aplicación en Cancún ha generado muchos conflictos y episodios de violencia en el recinto aéreo y en toda la ciudad, mismos que se han viralizado.
Muchos han solicitado a las autoridades locales que se incrementen las medidas de seguridad para prevenir este tipo de incidentes, especialmente en zonas de alta afluencia, como el aeropuerto.
La agresión al conductor de esta semana no fue el primer incidente de violencia entre taxistas y choferes de aplicaciones en Cancún. En otras ocasiones, sujetos identificados como taxistas han obstaculizado el acceso de los vehículos de aplicaciones al aeropuerto, afectando a cientos de turistas que visitan la ciudad.
Las autoridades locales y federales están llamadas a tomar medidas efectivas para prevenir futuros conflictos y asegurar que Cancún siga siendo un destino seguro y acogedor para todos.
Detienen a nueve operadores ilegales
La mañana de ayer se dio a conocer el resultado del operativo implementado por elementos de la Guardia Nacional en el aeropuerto, llevado a cabo durante la noche del pasado jueves, supuestamente para garantizar un servicio seguro a los visitantes, por lo que fueron revisados vehículos particulares y de la plataforma digital.
En total, nueve conductores de Uber quedaron detenidos y se les aseguraron sus unidades, al no contar con los permisos correspondientes para circular en el tramo federal, aunque fuentes cercanas mencionaron que el operativo, que tomó por sorpresa a conductores particulares, como del servicio privado, fue ante la presión de los recientes acontecimientos.
Posteriormente, se dio a conocer que los trabajadores del volante habían extorsionado a un conductor de Uber, por lo que fueron denunciados y personal de la Fiscalía General del Estado (FGE) los detuvo y puso a disposición por el delito de extorsión y lesiones. Se dio a conocer que a la víctima, en dos ocasiones le pidieron 10 mil pesos para dejarlo trabajar en el aeropuerto, por lo cual están tras las rejas a la espera de que se defina su situación jurídica.
GC