Guardias de seguridad de la Gran Plaza admitieron que están indefensos ante la delincuencia, toda vez que únicamente cuentan con radios y una macana, lo que no sirve de nada ante asaltantes armados.
Indicaron que sólo hay seis elementos por cada turno, entre hombres y mujeres, sin mencionar que recientemente renunciaron cuatro, por distintos motivos, entre ellos, la poca seguridad en su persona.
Por otro lado, locatarios de la plaza dijeron que se han registrado más atracos en el interior, pero que cuando solicitan imágenes de las cámaras de seguridad, no siempre tienen acceso a las mismas, sin mencionar que están convencidos de que las que están afuera, enlazadas al C2 y al C5, no sirven para nada.
Al momento de realizar un recorrido por el centro comercial no se detectó ni una sola patrulla en el estacionamiento y tampoco vigilancia policiaca en el interior.
Alrededor de las 11 de la mañana de ayer, Por Esto! recorrió la plaza, para conocer el sentir de los comerciantes luego del asalto a mano armada a una joyería, que ocurrió la tarde del domingo, que por cierto permanece cerrada y con cinta amarilla.
Había empleados de seguridad en dos de los accesos (mujeres), y tres más recorriendo el lugar, así como uno más apostado en la entrada de una tienda y, aunque la plaza no es muy grande, los que tienen negocios en el lugar aseguraron que son muy pocos elementos y ni chalecos antibalas les proporcionan.
“Qué pueden hacer con una macana ante delincuentes armados con pistolas, yo vi que los de seguridad únicamente avisaban por radio o con señas a sus compañeros porque algo raro habían detectado, pero no podían hacer nada más. Ni modo que pusieran en riesgo sus vidas; además, la policía tardó media hora en llegar, es más, los ladrones atravesaron toda la plaza para salir, porque ya se habían cerrados los otros accesos.
“En Suburbia bajaron la cortina para que no escaparan por ahí, pero al final salieron por el estacionamiento… y no se me hace lógico que ocurra ese tipo de asaltos acá, porque es una plaza chica, pero pues hay poca seguridad”, dijo un trabajador.
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Empleadas de las islas que se ubican en los pasillos, indicaron que hace una semana asaltaron a un compañero de una tienda china, a las 8:05 de la mañana, cuando la plaza abre más tarde, y aunque debe existir un control de entradas, gente ajena logró ingresar y asaltarlo. “Nosotros tuvimos un robo interno, solicitamos las imágenes de las cámaras a la plaza, pero no obtuvimos nada”, dijeron.
La empresa Jaguar es la que se hace cargo de la seguridad de esa plaza, pero algunos elementos revelaron que ya renunciaron cuatro, por diversos motivos, y uno de ellos es precisamente por la inseguridad que hay en toda la ciudad, y más en su trabajo.
Afuera del centro comercial hay una cámara que instaló el Gobierno y que apunta directamente a la plaza, pero hasta el momento, las autoridades no han dado a conocer si ese aparato captó algo, aunque los locatarios creen que no funciona, además, hay otras sobre la avenida Nichupté, pero que son para el tránsito vehicular y nada más.