Al caer menos del 50 por ciento la demanda del servicio de avistamiento y nado con el tiburón ballena en los dos últimos meses de la recién concluida temporada, algunos permisionarios proponen a la Conanp reducir 20% de las embarcaciones diarias en 2025, ante la posibilidad que se repita el fenómeno por la crisis económica mundial.
La capacidad de carga establecida en la zona de agregación de los especímenes es de 120 embarcaciones menores, de los municipios de Isla Mujeres, Lázaro Cárdenas y Benito Juárez, con la propuesta, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) y la Dirección General de Vida Silvestre (DGVS) sólo permitiría ingresar 96 navíos al día, del 15 de mayo a 17 de septiembre de 2025.
El tema sería discutido internamente entre ambas dependencias federales en los siguientes meses, a consulta con los permisionarios y sólo sería de manera transitoria, a solicitud de éstos.
Por lo general, los funcionarios federales realizan reuniones abiertas en las que permiten el ingreso de la prensa, pero evaden todos los cuestionamientos sobre temas de reducción de tiempo de avistamiento de cuatro a dos meses, por ejemplo, entre otros.
“No se trata de eliminar a permisionarios, en tanto no se viole el reglamento, lo que se busca es que voluntariamente descanse una vez por semana cada permisionario, a fin de alcanzar el número de naves propuesto”, dijo uno de los prestadores de servicio, al solicitar mantener bajo reserva su nombre.
Como se sabe, la temporada anterior terminó con menos del 50 por ciento de ocupación de asientos de las embarcaciones, fenómeno que no se había visto, entonces para prevenir, la propuesta de reducir salidas permitiría que el margen de pérdida económica se reduzca, si se continúa con la poca demanda, ello por la crisis económica mundial que se padece.
Hay otros prestadores de servicios que piden que sea mayor la reducción, incluso hasta el 30%, a fin de garantizar viajes con cupo máximo y se compensen las pérdidas que tuvieron muchos tour-operadores en los meses de julio, agosto y septiembre, en que varios llegaron al borde de la quiebra, al no tener reservas económicas para enfrenar esta eventualidad.
Uno de ellos es José, ya traía un mal lastre en los últimos años porque no tenía salidas diarias por la poca demanda que tiene su lancha, tenía viajes con un cupo de entre 60 y 70 por ciento en muchas de las ocasiones, lo que le hizo imposible reunir lo suficiente para renovar sus motores fuera de borda, ahora con la caída del interés del turismo en los últimos meses, en realidad dejó de salir muchos días por reunir el cupo suficiente.
La fuerte competencia en el sector imposibilita continuar en 2025 si el panorama no mejora, se tendrá que hacer a un lado y regresar enteramente a la pesca comercial, por lo que le urge un apoyo especial, como a otros, para promover el servicio al no contar con capital para invertir en publicidad y captar clientes de manera directa, pues ya los que tienen el dinero comenzaron a intensificar sus campañas para mejorar la ocupación de asientos en la siguiente temporada.