Quintana Roo / Sucesos

Así se planeó el robo al ferry México 1: El caso del “Pirata del Caribe”

Descubre la planificación detrás del robo del siglo en Quintana Roo, narrada por Salvador, conocido como "El Pirata del Caribe", en una entrevista exclusiva
El autor del robo al Ferry México 1 en 1999 describe cómo planeó la operación / Imagen creada con IA

En una entrevista reciente realizada por Saskia Niño de Rivera en su podcast "Penitencia", Salvador, conocido como "El Pirata del Caribe", habló sobre el infame robo marítimo de 1999, considerado uno de los más importantes en la historia de la Península.

Este delito, que ha permanecido en litigio durante 23 años sin una sentencia definitiva, involucró el robo perpetrado el 31 de mayo de aquel año a bordo del ferry México 1, que cubría la ruta entre Cozumel y Playa del Carmen, Quintana Roo.

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Un plan minucioso

Salvador narró cómo se planeó meticulosamente el robo, el cual fue organizado junto con los custodios de valores que transportaban una gran suma de dinero.

"El Pirata del Caribe", reveló que el acuerdo inicial era que los custodios involucrados serían arrojados al mar con chalecos salvavidas y aros de rescate para simular un ataque, con la intención de que quedaran como víctimas y no como cómplices. Sin embargo, el plan tomó un giro inesperado cuando uno de los custodios se arrepintió y faltó ese día a su asignación a bordo del ferry y otro falleció, lo que complicó el desarrollo del robo.

El grupo de delincuentes abordó el ferry como simples pasajeros, integrándose entre los más de 230 ocupantes. Se dividieron en dos equipos: uno se encargó de detener al capitán y el motor, mientras el otro controló a los pasajeros y sometió a los guardias de seguridad.

La ejecución del robo se realizó con tal precisión que la búsqueda de los náufragos permitió a los asaltantes ganar tiempo y evitar la persecución inmediata.

Consecuencias fatales

El desenlace fatal se debió a que uno de los custodios no estaba preparado físicamente para el reto de permanecer en el mar, lo que resultó en su muerte por ahogamiento.

Este hecho cambió por completo el rumbo del caso, ya que las autoridades comenzaron a investigar con mayor profundidad la participación de los custodios y la conexión con los autores del robo.

Salvador, quien ha pasado más de dos décadas en prisión sin recibir una sentencia, reflexionó en la entrevista sobre las circunstancias que lo llevaron a cometer el robo. Según explicó, su intención principal era ayudar a sus amigos, quienes enfrentaban dificultades económicas y hacerse él mismo de una cantidad extra que su trabajo como taxista, no le daba.

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