Delitos contra la salud en su modalidad de narcomenudeo es la principal línea de investigación tras la ejecución de un empresario promotor de conciertos y dueño de centros nocturnos, Tomás S., registrada la madrugada de ayer en la avenida Huayacán. En el mismo hecho resultaron lesionados tres hombres más, dos de estos supuestos escoltas del ahora occiso.
El ataque armado de más de 50 balazos se reportó al número de emergencias 911, cuando sujetos armados a bordo de un taxi del sindicato Andrés Quintana Roo llegaron al local en remodelación de la víctima, que en próximos días sería inaugurado como una terraza bar. Ahí rafaguearon a los presentes, para luego darse a la fuga sobre la avenida Prolongación La Luna.
Elementos de las diversas corporaciones de seguridad arribaron a la Supermanzana 311, manzana 43, sobre la avenida antes mencionada, donde confirmaron que había cuatro personas lesionadas, tres al interior del establecimiento y una más a unos 400 metros, pues logró correr cuando iniciaron las detonaciones.
Minutos después, paramédicos de la Benemérita Institución de la Cruz Roja y del Escuadrón de Respuesta de Urgencias Médicas llegaron al sitio para brindarle atención médica a las víctimas. En ese momento confirmaron que el empresario Tomás S, de 36 años, había perdido la vida.
Asimismo, se informó que Juan Carlos “N”, de 32 años, tenía un impacto de entrada por salida en el tórax, mientras que Luis Enrique “N”, de 37 años, y Carlos Justino “N”, de 46 años, empleado del Ayuntamiento, también fueron alcanzados por las balas y fueron trasladados de emergencia a diversos hospitales.
Tras acordonar el área, se pidió la intervención de la Fiscalía General del Estado para las investigaciones de este ataque armado, que cobró la vida del empresario y dejó lesionados a tres hombres, dos de ellos sus presuntos escoltas. Fue así que llegaron al sitio policías de investigación acompañados de peritos forenses.
Durante la diligencia se mencionó que el ahora occiso recibió al menos 10 impactos de bala en el tórax, abdomen, brazos, pelvis y área lumbar, lo que provocó que perdiera la vida prácticamente al instante. El cuerpo fue trasladado a las instalaciones del Servicio Médico Forense.
Tras procesar la escena, se confirmó que se encontró una cajetilla de cigarros con una bolsa de presunta marihuana. Además, se localizaron 57 casquillos percutidos y tres ojivas amorfas, de calibres .380 y 9 milímetros, pues se presumió que fueron al menos cuatro sujetos los que dispararon contra las víctimas, para luego darse a la fuga hacia la avenida La Luna. Pese a que el hecho quedó grabado en cámaras del C5, no se logró ubicar a estos sujetos.
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Los agentes ministeriales se entrevistaron con la pareja del ahora occiso, quien mencionó que llegó al local en remodelación para ver en qué ayudar a su esposo, pero después decidió salir a la farmacia que está a unos metros, cuando de repente escuchó la balacera, pero permaneció unos minutos en la farmacia para luego salir a ver qué había ocurrido.
Agregó desconocer si el empresario tenía problemas o lo habían amenazado, pues era muy cerrado en sus negocios y nunca le compartía información sobre lo que hacía. Sin embargo, las autoridades ministeriales presumieron que este ataque fue por un tema de narcomenudeo.
