Ariel Avilés Marín “Debemos gastar primero en educación,
Segundo, en educación,
Y tercero, en educación”
José Mujica.
La educación es un bien intangible pero trascendente en el devenir de la humanidad, el vehículo idóneo para aprehender ésta es la lectura; poco o nada habrá de quedar incorporado al conocimiento intelectual individual del ser humano que no haya llegado por medio de la lectura. La exposición de un sabio, un maestro, o cualquiera que nos ponga en contacto con el conocimiento será efímera, a menos que tomemos los apuntes correspondientes, cuya lectura nos llevará a la inmanente adquisición del conocimiento. Benjamín Bloom, en su Taxonomía de los Objetivos de la Educación, establece seis niveles en la categoría de las conductas a obtener por medio de ellos, y también asienta que el nivel mínimo que debemos buscar en la educación es el tercero, es decir, la aplicación práctica del conocimiento, pero para llegar a este nivel el proceso de enseñanza aprendizaje ha de surcar los dos anteriores, y esto, sólo se logra a través de la lectura.
En días pasados un grupo de jóvenes de la preparatoria de la Escuela Modelo se acercó a mí para exponerme un plan que están poniendo en práctica. Estos imberbes emprendedores han integrado un grupo, cuyo objetivo es llevar y practicar la lectura con los niños y preadolescentes del CAIMEDE, con el objeto de fomentar en ellos esta sana costumbre que los puede llevar a ser mejores seres humanos en un futuro no lejano. Con gran entusiasmo han adquirido una buena cantidad de libros para llevarlos a este centro de atención del DIF y donarlos, para ampliar la biblioteca que ahí se tiene.
Este dinámico y generoso grupo de idealistas se ha autonombrado “Liga Artística Juvenil de Yucatán”, han emprendido ya sus primeras acciones, han visitado el CAIMEDE, han leído con los internos del lugar y, aprovechando la contingencia de la FILEY, obtuvieron un importante donativo en especie, de una prestigiada librería de Xalapa, Veracruz, Librería Los Argonautas, cuyo propietario, Marduk Obrador Garrido, generosamente les entregó ahí mismo un amplio repertorio y se comprometió con ellos a hacerles llegar más. ¡Necesitamos más gente como este señor!
La Liga Artística Juvenil de Yucatán está integrada por Abril Lira Blando, como presidente; colaboran con ella activamente Casandra Bastarrachea Baas, Aurora Montenegro Espinosa, Adriana Rivera Martínez, José Alberto Magaña Torre y Sergio Iván Solís Rodríguez. El grupo se integra y, de inmediato, emprende acciones, y esto es desde el 25 de marzo de este año. Es un grupo dinámico y tiene muy claros sus objetivos y los lineamientos para llevarlos a cabo. Su visión y misión está muy bien definida, clara y, sobre todo, es viable.
Ellos mismos plantean su plan de acción desde una perspectiva bien definida. “Fomentar en los niños el deseo de aprender. Especialmente en quienes, por diferentes razones y experiencias, tanto familiares como escolares, se enfrentan a situaciones que les han marcado negativamente y han dificultado su aprendizaje”. Plantean una metodología para el logro de sus objetivos: “Se implementará un espacio orientado a los niños, este espacio consiste en un dispositivo metodológico de trabajo grupal, colaborativo y participativo donde se desarrollarán contenidos específicos a través de actividades lúdicas, expresivas e inclusivas articuladas entre sí, donde se proporcionará un acompañamiento en lo que resta de este ciclo escolar”.
Tienen también una visión a largo plazo: “Daremos continuidad a las bases del proyecto e, incluso, expandiremos actividades incluyendo música, teatro, danza y artes visuales”. Surge una pregunta: ¿Por qué en el CAIMEDE? Nos relatan: “Este proyecto surgió durante una práctica en la materia de Diseño de Proyectos Comunitarios, se presentó la oportunidad de ir a apoyar a los niños del CAIMEDE con asesorías, que están en un rango promedio de primaria y secundaria; de ahí llegamos a la conclusión de que existe un grave problema de comprensión de la lectura. Como resultado de estas visitas dialogamos entre nosotros, buscamos la orientación de los maestros del CAIMEDE, de nuestros maestros de la preparatoria, y así, surge la inquietud y con ella la iniciativa de crear un club o taller para desarrollar esta capacidad. Buscan también: “Desarrollar la capacidad lectora y desarrollar la lectura como un hábito por voluntad propia”.
El dinamismo y la inquietud de estos jóvenes les lleva a desarrollar también una campaña de donación de libros para aplicar a este generoso plan. Ha respondido a esta petición La Casa del Libro del Mtro. José Luis Domínguez Castro, que ha aportado a este plan un valioso lote de obras de lectura. Para difundir sus acciones, así como para contactar con posibles donantes de libros, los muchachos han creado un sitio en Facebook con el nombre de la agrupación: Liga Artística y Juvenil de Yucatán. También indican que los donativos de libros se pueden hacer llegar a la Preparatoria Escuela Modelo. ¡Ojalá encuentre eco su petición!
Por último, los jóvenes expresaron su agradecimiento; en primer lugar a la Escuela Modelo, por todo el apoyo dado a este generoso proyecto; al Mtro. José Luis Domínguez Castro y su librería La Casa del Libro, por su generosa donación; y a Marduk Obrador Garrido, y la Librería Los Argonautas, de Xalapa, Veracruz, por su donación y las próximas por hacer.
Encontrar en nuestra sociedad un grupo de adolescentes con esta visión social, con estas perspectivas, con este dinamismo para lograr objetivos nobles y generosos, nos alienta a seguir confiando en la humanidad, en la juventud, en la educación, como un proceso formador de hombres y mujeres de bien, que nos hacen vislumbrar un mañana mejor para la humanidad.