El Frente Frío Número 23 no impidió que turistas nacionales y extranjeros disfruten del último domingo del año en el puerto.
Decenas de personas visitaron la playa yucateca para relajar el cuerpo y olvidarse por un momento de la pandemia del COVID-19.
A pesar de no ser un domingo tan concurrido como los anteriores, las personas se instalaron desde temprano para disfrutar la brisa del mar y observar el atardecer.
Algunos en pareja y otros con su familia, así llegaron los bañistas a la costa yucateca. La seguridad policíaca del puerto hizo que la gente obedeciera las medidas de higiene al arribar al malecón, pero dentro de la playa muchas personas se olvidan de guardar su sana distancia.
Pese al clima frío que empezó a sentirse al atardecer, la gente no se espantó y ocupó las palapas, camastros y mesas para almorzar.
El sector restaurantero y hotelero continúa luchando con la crisis económica y agradece el arribo de los turistas a Progreso, pues son los principales en reactivar ambos rubros.
Hasta el último reporte del Gobierno del Estado, Yucatán se encuentra en semáforo naranja y será de vital importancia que la gente acate las reglas para no elevar contagios o cerrar a futuro los negocios.
A tan sólo cuatro días de culminar el año 2020, comerciantes del puerto esperan que se eleve el número de visitantes para seguir sobreviviendo ante la pandemia.