Mérida, Valladolid y Cozumel en un estudio sobre el polvo urbano
Mérida, Valladolid y Cozumel participan en un proyecto llamado “La contaminación por metales pesados en el polvo urbano en ciudades mexicanas antes, durante y después del COVID-19”.
La coordinadora de este estudio en Mérida, Yameli Aguilar Duarte, Doctora en Geografía Ambiental por el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap), dijo que se trata de un proyecto a nivel nacional coordinado por el Dr. Francisco Bautista, y están participando también otras ciudades mexicanas, como la Ciudad de México, Morelia, Michoacán; Villahermosa, Tabasco, Mexicali, Baja California, y Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.
Dijo también que en esta etapa durante la contingencia, el muestreo empieza en este mes, y el objetivo es evaluar el nivel de contaminación por metales pesados que hay dentro y fuera de los hogares a partir del estudio de las muestras de polvo recolectadas en el interior de las casas y en las banquetas de cada casa participante. Estas muestras se colectarán los días 9, 16, 23 y 30 de mayo, es decir, en cuatro ocasiones durante ese mes, y cada muestra deberá tener entre 30 y 50 gramos. Con eso es suficiente, o lo que salga del barrido, pues igual puede ser más. Una vez que esté recolectada la muestra, para lo cual la Dra. Yameli entregará las bolsas de plástico para meterlas, hay que marcar cada bolsa con los datos de la dirección del hogar, la colonia, el fraccionamiento y el nombre de la ciudad, así como la fecha, y si es interior, es decir dentro de la casa, o exterior, en la banqueta. También, la Dra. Yameli pasará a recogerlas. Se espera contar para el muestreo con un mínimo de 100 casas, pero se espera llegar a un número de 250.
Se hizo uno de las calles
entre el 2015 y el 2016
Por otra parte, la Dra. Yameli comentó:
–Este estudio de los metales pesados ya se ha realizado previamente también en diversas ciudades incluyendo Mérida, Yucatán. Se realizó entre el 2015 y el 2016, pero se tomaron los polvos en las calles y en las avenidas de 100 puntos distribuidos en toda la ciudad.
En aquel estudio realizado en condiciones normales la actividad humana era la que normalmente estamos acostumbrados a ver: el tráfico vehicular, la actividad de las industrias, y algunos resultados fueron presentados en congresos a nivel estado y nacional.
–¿Qué se encontró, Dra. Yameli?
–Se encontraron niveles importantes de plomo, zinc y cobre que son metales cancerígenos, también se encontró que las más altas concentraciones se ubican en el Centro Histórico y alrededor. Básicamente el Centro Histórico presenta concentraciones importantes. Sin embargo, dependiendo del tráfico vehicular y la actividad industrial se notaban niveles destacados, principalmente de plomo en diversas partes.
No sabemos de dónde proceden, porque recordemos que el polvo urbano es una mezcla de diferentes partículas y, al ser una mezcla, pues son partículas que se pueden generar de diferentes lugares. Tuvimos una relación importante, pues donde había avenidas muy transitadas, se encontraron concentraciones importantes de metales pesados, pero allá también pueden realizarse otras actividades antrópicas (del ser humano).
Extremadamente pequeñas
–¿Entonces vivir en una avenida es exponerse a más contaminación?
–De hecho sí. También se analizaron los tamaños de las partículas, y se encontraron partículas muy pequeñas, de tamaños micrométricos y nanométricos. Y esas las podemos respirar, son fácilmente respirables porque son extremadamente pequeñas.
Ese estudio fue parte del trabajo de una tesis de una estudiante. Y también comenta que el plomo sirve para hacer baterías, pinturas, se encuentra en pinturas, pigmentos, material de soldadura, esmaltes, incluso productos cosméticos como pintura de uñas, entonces hay varios productos en los que se usa plomo.
–¿Es riesgoso para la salud?
–Sí. Sobre todo si estamos muy expuestos todo el tiempo, se corre el riesgo de estar acumulándolos, estos metales pesados son cancerígenos.
En la CDMX también se ha realizado este tipo de estudios, y es diferente que en Mérida. La CDMX es una ciudad más grande, urbanísticamente también es más compleja, porque recordemos que tiene segundos pisos en las avenidas. Pero también es una ciudad que está asentada en un valle rodeado de montañas y volcanes, a diferencia de Mérida, la Ciudad de México está más contaminada. Y los niveles de plomo incluso están por arriba de la Norma Oficial Mexicana (NOM), lo que no es el caso de Mérida, pues no estamos por arriba de la norma, estamos debajo, pero eso no significa que no sean potencialmente peligrosos.
Cáncer: diversos orígenes
Aquí lo importante que hay que mencionar también es que el cáncer puede tener diferentes orígenes y que hay diferentes tipos de cáncer.
–¿Se hace este estudio en la ciudad porque hay más contaminación en la ciudad que en el campo?
–Una ciudad funciona de una manera más compleja, pero sí estamos más expuestos a diferentes contaminantes que se pueden respirar que en el campo. En el campo no es lo mismo la agricultura tradicional o la agricultura intensiva. Al menos que estemos cerca de una fuente de contaminación, porque se han dado esos casos de algunos empresarios agrícolas que fumigan hasta con avioneta, pero ese tipo de fumigación aérea es una actividad puntualmente localizada, en cambio en una ciudad hay una mezcla de actividades y es un poquito más complejo.
Legislación más adecuada
–Doctora, ¿para qué y por qué se hacen este tipo de investigaciones?
–¿Por qué se hacen este tipo de investigaciones?, porque es importante proponer normas y legislación ambiental más adecuadas a las realidades que existen actualmente. Se ha escuchado en noticias internacionales que han bajado los niveles de contaminación en estos días de la contingencia, y queremos aprovechar esta etapa de baja actividad humana para conocer qué se encuentra en los polvos, cuáles serían los niveles de contaminación de metales pesados en esos polvos. Pero también es interesante saber qué es lo que hay dentro de las casas. Incluso en la CDMX han tomado el polvo que se encuentra en los árboles. Aquí sólo lo que hay en las calles. Y ahora en las casas y en las banquetas de las casas para comparar estas concentraciones de metales pesados antes y durante la contingencia, y ya haremos el después de la contingencia, pero ya tendríamos una base de comparación, sobre todo cuando baja la actividad humana. Pero también podríamos comparar entre las ciudades de estudio, porque el contexto geográfico varía entre las ciudades mexicanas. No es lo mismo la Ciudad de México que es una mega ciudad, pero además su desventaja es que está rodeada de montañas, a diferencia de la ciudad de Mérida que está en una planicie a 30 kilómetros de la costa. No tenemos montañas, pero tenemos un acuífero poco profundo. Y otro ejemplo que se va a estudiar es Cozumel, que es una isla.
Entonces se van a estudiar los metales pesados pensando también en las diferencias geográficas y en las diferencias de los tamaños de las ciudades, y también pensando en su actividad económica predominante, todas estas variables ayudan a comprender las diferencias también de lo que se encuentra, del tamaño de las partículas y las concentraciones de los metales pesados que se encuentran en los polvos. Y toda esta información ayuda a mejorar las normas ambientales.
Invitación
En esta parte, nuestra entrevistada señaló:
–Por eso estamos invitando a los ciudadanos a ser proactivos y a participar desde sus propios hogares. Nosotros dentro de nuestra casa normalmente barremos, entonces la actividad consiste en eso: después de barrer toda la casa, retirar los residuos más grandes y colocar el polvo en una bolsa de plástico que nosotros los coordinadores vamos a entregar.
–¿Cómo se pueden inscribir?
–Con la Dra. Yameli Aguilar Duarte para registrarse, puede ser a su correo electrónico: [email protected], también por el Facebook: Yameli Aguilar Duarte. O también un mensaje a mi número telefónico 9992 05 92 28 por WhatsApp.
Para Valladolid el Coordinador es el Maestro Joaquín Aguilar Chan, y se pueden registrar en su correo: [email protected], y el Coordinador en Cozumel: Oscar Frausto Martínez: [email protected].
Todos los coordinadores, posteriormente a la contingencia, se pondrán de acuerdo con los voluntarios para recoger las muestras.
Todas las muestras serán enviadas por los coordinadores al Laboratorio Universitario de Geofísica Ambiental de la UNAM, con sede en Morelia, Michoacán.
Invitamos a los ciudadanos a que sean partícipes de manera activa proporcionando estas muestras que sería interesante analizar para saber qué estamos respirando en nuestros hogares. Cabe destacar que los resultados se van a entregar a los voluntarios para que también tengan ese conocimiento.
(Roberto López Méndez)