Más de un comercio se ha visto afectado por la delincuencia en la localidad y sus alrededores, así como vecinos de Jardines de San Pedro, San Pedro Nohpat, Villas de Oriente, entre otros, han sido víctimas de la delincuencia.
Comercios, en su mayoría de alimentos preparados, se encuentran vulnerables, los colonos tampoco se libran de los robos a casas habitación, pues en reiteradas ocasiones se ha hecho presente este tipo de denuncias ante las autoridades correspondientes, que no han hecho nada al respecto.
Joaquín Flores dijo que “a mi casa entraron dos veces a robar el año pasado, yo no tenía dinero para poner protectores, quitaron la ventana con todo y marco, le quitaron la cerradura a la puerta de atrás y sacaron todo lo que había; mesas y mi tele, incluso se llevaron los vasos de mi cocina y hasta mis zapatos, esto ya es el colmo, fui a denunciarlo, pero hasta ahora no tienen respuesta, mejor lo dejé por la paz”.
Por su parte, Montserrat Echeverría comentó que “no me ha tocado que me roben, pero sí a mi yerno cuando regresaba de trabajar, él labora en una gasolinera y a diario recibe propinas, entonces no sé si ellos llevaban vigilándolo desde antes o sólo fue coincidencia, pero lo asaltaron por Fontana y le quitaron todo, incluyendo su reloj y sus propinas del día y eso que no era tan tarde, él tomó un mototaxi y ese mismo chofer fue quien le quitó su dinero, como estaba oscuro ya no pudo identificarlo”.
Por otro lado, la subcomandancia que se está construyendo en el fraccionamiento Jardines de San Pedro ha retomado su curso después de la pausa por las fiestas decembrinas.
Manuela Chi, que tiene un puesto de antojitos en el fraccionamiento San Pedro Nohpat, externó que “ya me robaron mi tanque de gas en dos ocasiones y no sólo a mí, sino a varios ya les tocó vivir la delincuencia que hay en los fraccionamientos, ya queremos que se termine la subcomandancia que están haciendo”.
Los vecinos pidieron más vigilancia durante las noches y madrugadas, cuando más se dan estos actos de delincuencia.
Carmen Aké manifestó que “en la mañana no hay tanto problema porque si pasa algo todos los vecinos se meten y ayudan, pero de noche, sobre todo en la madrugada, deberían poner más atención los policías, pues es cuando los malhechores salen a hacer sus barbaridades y como no hay mucha gente a esas horas, pues no hay quien los detenga”.