El limón comienza a levantar su precio, aunque por el momento sólo en beneficio de los “adelantados”, comentaron varios productores de esta comunidad destacando que, aunque pudiera ser como algunos dicen “cuestión de suerte”, en realidad esto es fruto del esfuerzo de los productores, que siguen al pie de la letra las recomendaciones para mantener sus plantas y tierras dando resultado dentro de los tiempos esperados de cosecha.
Productores continúan vendiendo limones de la cosecha anterior, pues prefirieron aguantar su mercancía en espera de una mejora en cuanto al precio, lo que aparentemente arrojó una demanda de cítricos por parte de los compradores que llegan a esta comunidad.
La comercialización de la caja llegó a los 600 pesos con el limón verde de la cosecha nueva, 400 pesos el limón verde de la cosecha anterior, 350 el alimonado grande, así como 130 pesos la naranja dulce, y la lima de mil a mil 200 pesos, dependiendo la calidad.
Ante los precios mencionados, los agricultores locales se ven favorecidos, pues señalaron que ven recompensados sus esfuerzos y su fe en el campo, esperando que esta derrama económica se mantenga durante varios días más.
El detonante de su precio
Sin embargo, otros productores comentaron que esta escalada de precios se debe a la entrada de “especuladores” a quienes ellos definen como compradores que, ante la demanda del limón en lugares como Estados Unidos, Europa y Asia, vienen en busca de cierta cantidad de cajas y, al no convenirles generar más gastos por su estancia en Yucatán, prefieren detonar el mercado aumentando el precio y llevarse así rápidamente los productos.
Dijeron también que estos compradores no se meten a mercados como el Oxkutzcab, donde se les haría más difícil poder establecerse para comprar, por lo que prefieren llegar directamente hasta los lugares de producción donde, mediante una rápida campaña de perifoneo, se hacen de los productos que necesitan gracias a que entran detonando el mercado con un súbito aumento de los precios el mercado establecido, es decir, en las empacadoras donde los productores locales acostumbran vender su producción, ya que los precios oscilan entre los 380 y 450 pesos, dependiendo de la calidad del producto.
Señalaron que el costo de estos productos depende, entre otras cosas, de la irrupción en el mercado de los grandes productores citrícolas como Veracruz, Oaxaca, Colima y Michoacán, que están a punto de comenzar a sacar sus cosechas, pero por de pronto la derrama económica es benéfica para la población.
Finalmente, los productores coincidieron en que el verdadero sueño es que de acá a un mes se pudieran mantener esos precios que entonces sí beneficiarían a toda la comunidad, pues muchos igualmente están a la espera de que su producción alcance la “calidad” necesaria para poder iniciar la cosecha, siendo de gratos recuerdos cuando hace algunos años y, ante la escasez de cítricos en otros lugares, el huacal rebasó los mil pesos por caja, dejando una gran derrama económica a la comunidad.
Cabe mencionar que la región citrícola más importante en el estado de Yucatán y donde se desarrolla el 80 por ciento de la citricultura en la Entidad es el corredor de la Zona Sur, también denominado Cono Sur, y comprende los municipios de Oxkutzcab, Dzan, Akil, Ticul, Maní, Tzucacab, Santa Elena, Tizimín, Motul, Tekax, Muna y Sacalum,
Asimismo, la comunidad de Dzan es cien por ciento agrícola, dedicada a la citricultura en especial, ahora por cuestión de mercado de limón persa. En sus inicios en los años 59 y 60, Dzan aprendió de la citricultura, sus huertos son hoy por hoy en el Estado el primer lugar en producción de naranja y limón.
SY