Con el malestar de algunos comerciantes y dueños de restaurantes cuyas ventas se desplomaron hasta en un 50 por ciento debido al cierre de la playa el fin de semana, este lunes se reactivó la actividad en este Pueblo Mágico, con la llegada de numerosos visitantes.
Caso curioso es que al reanudarse la movilidad humana con entrada de taxis, vehículos particulares, y hasta autobuses, no se estuvo entregando el gel antibacterial a la gente, ni hubo alguien que los exhortara a guardar la sana distancia, a la entrada del lugar.
Después de la inactividad en la playa, que permaneció cerrada los días 26, 27 y 28 de marzo del presente año, por motivos de la pandemia por el COVID-19; a la entrada al puerto de Sisal no se practicó ningún tipo de restricción.
Ahora los comerciantes, restauranteros, prestadores de servicios turísticos, vendedores, y hasta los que se dedican a la renta de palapas en la playa, tendrán que aprovechar de este lunes al próximo jueves, pues el viernes dos, sábado tres, y domingo cuatro de abril, en que generalmente son los días de la Semana Santa que hay más movimiento de gente, se volverá a cerrar el acceso a la playa.
El jueves pasado informamos que, al igual que como ocurrió en Progreso, durante dos fines de semana de este período vacacional de Semana Santa, permaneció cerrado el acceso a las playas en el puerto de Sisal, tal como informó el comisario municipal, Miguel Antonio Ek Pech.
A pesar de que a la mayoría de los comerciantes y prestadores de servicios les fue y les irá como en feria, por el cierre de playas, ninguno externó su desacuerdo con la medida.
Gerardo N., que labora en conocido restaurante, comentó que las ventas se desplomaron hasta en un 60% por el cierre de la playa. El comisario Ek Pech ha insistido en que estas medidas son para evitar mayores problemas por el COVID-19, por lo que se hizo necesario el cierre de la playa en el puerto sisaleño, tomando en cuenta las aglomeraciones que se habían venido registrando en este pueblo costero semanas atrás.
Rita N., dedicada al negocio de la renta de palapas, informó que los tres días de inactividad en ese negocio, por el cierre del acceso a la playa, les ocasionó severas pérdidas económicas. Dijo que espera recuperar algo en los cuatro días (de lunes a jueves de esta semana) en que permanecerá abierto el paso al mar.
Tal como dispusieron las autoridades, durante los días viernes, sábado y domingo, a ninguna persona se le prohibió el paso al puerto, e incluso pudieron disfrutar de los restaurantes y otros negocios, que funcionaron con normalidad, adoptando las medidas de higiene decretadas anteriormente por la pandemia. Decenas de familias llegaron de diferentes lugares del interior de la República, incluso hasta autobuses de turistas, para conocer el Pueblo Mágico de Sisal, y aprovechar que se reanudó la actividad en la playa.