Los señores José Santiago Basulto Fernández y María del Socorro Dzul Canul piden justicia para su hija Lissie Montserrat Basulto Dzul, de 22 años, quien falleció el pasado domingo 17 de noviembre en el Hospital O’Horán, a donde fue trasladada de urgencia tras ponerse grave en el Hospital San Carlos, en Tizimín, en donde apenas una semana antes había dado a luz.
La joven dejó huérfanos a tres pequeños, entre ellos a su recién nacida, quien se quedará a cargo de su papá en el municipio de Panabá. Los otros dos quedarán al cuidado de los abuelos maternos que viven en la comisaría de Loché.
Los padres de la fallecida detallaron todo lo que ocurrió y que derivó en la muerte de la joven. Explicaron que el domingo 10 de noviembre su hija fue ingresada al Hospital San Carlos, pues ya presentaba contracciones, y a las 10 de la mañana nació su bebé por parto natural. Sin embargo, se quedó internada.
Doña María del Socorro comentó que el martes 12 platicó con su hija, quien se quedó bajo el cuidado de su yerno, quien horas más tarde le llamó para informarle que Lissie tenía problemas para respirar, por lo que los médicos optaron por colocarle una mascarilla con oxígeno, pero se complicó y tuvo que ser intubada.
La familia manifestó su extrañeza que por un parto ocurrieran estas cosas de gravedad extrema.
La madrugada del miércoles, Lissie Montserrat fue llevada de urgencia al Hospital O’Horán en Mérida, en donde se quedó ingresada hasta que el domingo 17 se informó a la familia que la joven había fallecido. La causa, de acuerdo con el reporte, fue falla orgánica múltiple, coagulación intravascular diseminada, y choque séptico refractario, es decir, la infección generalizada en todo el cuerpo le causó una baja presión mortal.
Los papás de la muchacha dijeron que, de forma extraoficial, se les dio a conocer que parte de la placenta no fue retirada a la hora del parto, y dentro del cuerpo de su hija se habría descompuesto generando la sepsis o infección que finalmente la llevó a la tumba.
Ante tal situación, dijeron que interpondrán la denuncia correspondiente ante la Fiscalía General del Estado, y que llegarán hasta las últimas consecuencias para que se sancione a quienes hayan tenido qué ver con la negligencia que le costó la vida a Lissie Montserrat.
Asimismo, pidieron que se tomen acciones inmediatas contra el personal del Hospital San Carlos, pues se ha sabido bajo el agua de muchos otros casos de negligencia que, por desgracia, nunca salen a la luz debido a que las víctimas son personas de escasos recursos que no acuden con las autoridades correspondientes en busca de justicia.
Mientras tanto, tres pequeños se quedaron sin su mamá, entre ellos la pequeña recién nacida quien nunca la conocerá, lo cual también causa a los abuelos un profundo sentimiento de tristeza.